El buen tiempo y las ganas de feria después de varias citas a medio gas facilitaron la afluencia de gente a Lalín durante toda la mañana de ayer y primeras horas de la tarde. El mercado recuperó los puestos de ropa, calzado, aperos y utensilios domésticos, que se sumaron así a los de alimentación y plantas, únicos permitidos por el ayuntamiento durante las restricciones.

El Campo da Feira Vello y las calles aledañas, como Rosalía de Castro y Fonte Sanguiña, recuperaron la normalidad, aunque, lógicamente, adaptada a las medidas sanitarias impuestas para luchar contra la pandemia de COVID-19. También se incrementó la oferta de plantas y semillas en la calle Caracas, de la urbanización de O Regueiriño, si bien este tipo de puestos estaban permitidos en las anteriores citas.

Vila de Cruces tomará hoy el relevo ferial de la capital dezana, también con la recuperación de todos los puestos. Las siguientes citas serán ya la próxima semana en Dozón (11), Agolada (12) y A Bandeira (14), que ya volvió el domingo.