Los niños pudieron volver a jugar ayer en los parques infantiles de Silleda. El hambre acumulada de tobogán y columpios se vio favorecida por el buen tiempo. Una señal más de la mejoría sanitaria generalizada que vive la zona. De hecho, no hubo aumento de contagios activos de COVID-19 en ningún municipio de Deza y Tabeirós-Montes, sino que, en el peor de los casos, se mantienen en parámetros similares a los de días pasados.

Precisamente, Silleda es el territorio con más personas infectadas por el virus, 24, igual que el jueves. Con quince positivos detectados en los últimos catorce días, su incidencia sí se reduce y es ahora de 170 casos por 100.000 habitantes. La vacunación de mayores de 80 años regresa el martes a la capital de Trasdeza, de 10 a 15 horas.

En Lalín, que acogió otra remesa de dosis ayer, había 20 personas contagiadas, una menos que la víspera, y su incidencia bajaba a 89 por 100.000, dado que son 18 los contagios diagnosticados en dos semanas. En similar situación se encuentra A Estrada, con 21 positivos en el mismo período de tiempo, que le otorgan una incidencia ligeramente superior a 100. Su cifra de casos activos no varía de 17 desde el martes, y siete en el hospital.

En cambio, Cerdedo-Cotobade recortar cinco por tercera jornada consecutiva y queda en once, y ya son menos de una decena los casos detectados en dos semanas, lo que deja su incidencia por debajo por debajo de 150.

En Agolada quedan tres enfermos de coronavirus, tras dar cuatro altas, si bien su incidencia sigue por encima de 150. No llega a 50 la de Forcarei y Vila de Cruces, en donde ayer surgió un positivo y se dio una alta por curación, de modo que se mantiene en tres casos activos. Rodeiro acumula catorce días libre de virus y Dozón lleva prácticamente todo el mes.

El panorama no cambia en los centros educativos, con quince casos en instalaciones de Silleda, A Estrada, Lalín y Rodeiro.