La borrasca Karim pasó en la jornada de ayer con Galicia causando inundaciones en algunos puntos y vientos que llegaron a alcanzar los 150 kilómetros por horas. En las comarcas de Deza y Tabeirós también sopló el viento, con rachas que incluso superaron los 90 kilómetros por hora, aunque las incidencias fueron aisladas. La mayor parte de los servicios prestados por Emerxencias se centraron en la retirada de árboles en diferentes zonas del rural.

Un cartel derribado por el viento en la céntrica plaza de la farola de A Estrada.

Así sucedió en A Estrada, donde Emerxencias tuvo que acudir a despejar viales en Matalobos, Vinseiro, Moreira y Camporrapado. En el casco urbano también se registraron algunas consecuencias de la borrasca. En la céntrica calle Calvo Sotelo por ejemplo la Policía Local y Emerxencias decidieron acordonar una zona delante de las oficinas de Abanca y el histórico edificio que se encuentra a su lado. El motivo fue una zona de planchas, en el lateral del edificio en el que se encuentra Abanca, que amenazaban con desprenderse y caer sobre la acera. Además, hubo otras incidencias menores como la caída de luminosos o contenedores.

Por otro lado, los árboles caídos centraron las intervenciones en la comarca dezana. Los bomberos del parque intercomarcal y miembros del GES de Lalín acudieron a las parroquias lalinenses de Gresande y Catasós, y los primeros también a Toiriz y al casco urbano de Silleda para retirar los arbustos que el temporal Karim tumbó durante la noche de ayer.