“Es la primera noticia que tengo. Me pillas con el pie cambiado. Ahora estaba centrado en otra cosa”, dijo en la tarde de ayer el teniente de alcalde de A Estrada, Juan Constenla, cuando esta Redacción le preguntó directamente por la posibilidad de que la renuncia de la alcaldesa de Marín, María Ramallo, a su acta de diputada en el Congreso de los Diputados y la condición de diputada autonómica de la siguiente en la lista, la vilagarciana Elena Suárez Sarmiento, le abra las puertas de la Cámara Baja en Madrid.

Es la posibilidad que ayer corrió como un reguero de pólvora en los mentideros políticos locales después de que la que fuera cabeza de lista por Pontevedra en las elecciones generales de noviembre de 2019 anunciase su intención de renunciar a su acta en el Congreso para centrar sus esfuerzos en su cargo como alcaldesa del municipio pontevedrés de Marín. La duración de la pandemia la ha convencido de que ahora lo que procede es dedicarse “exclusivamente” a Marín. “A pesar de que en marzo quisimos ser optimistas y pensar que ya la habríamos superado, llegados a este punto, lo cierto es que la pandemia no deja de golpear y volvemos a vivir meses excepcionalmente difíciles”, señaló ayer Ramallo por carta. Aun defendiendo que durante todos estos meses pudo compaginar ambos cargos –sobre todo desde que el COVID-19 impuso una mayor gestión telemática– la todavía diputada del PP por Pontevedra en el Congreso entiende que “vienen meses muy complicados” que, a su juicio, “requieren de un especial esfuerzo”. Su renuncia se hará efectiva a finales de enero. Será entonces cuando corra la lista y se sepa si la siguiente, la arousana Elena Suárez Sarmiento prefiere seguir siendo diputada autonómica o dar el salto a Madrid.

Si renuncia a hacerlo, a Juan Constenla –el siguiente en la candidatura– se le abrirían las puertas de la Cámara Baja. Tendría así la oportunidad de convertirse en diputado estatal y cumplir el deseo que enunció en marzo de 2019 –cuando trascendió que figuraría en la lista del PP por Pontevedra– de “mirar en Madrid por las necesidades de la comarca y la provincia” y, especialmente, por la ansiada variante de A Estrada, cuya ejecución podría defender en el Congreso.

Entonces –cuando estaba a punto de encarar dos campañas electorales como candidato a diputado y a edil con la candidatura con la que José López revalidaría de nuevo su mayoría absoluta– Constenla ya señalaba que entendía que entre el puesto de diputado en Madrid y el de concejal de A Estrada existía “compatibilidad”. Aun siendo plenamente consciente de que ser diputado en Madrid le obligaría a dejar parte de las responsabilidades que asume en el municipio, afirmaba que le gustaría formar parte del Congreso y, a la par, del pleno local. Era, en opinión del alcalde José López “un reconocimiento” a sus muchos años de trabajo y a que A Estrada es un “referente” dentro del PPdeG. Constenla sabía que hacía “tiempo que no iba nadie” de A Estrada “tan arriba” en una lista y que esta “decisión del partido” apostando por la representatividad por comarcas” le ponía más cerca al PP de A Estrada poder luchar por la variante en Madrid. Si es así o no, en breve se sabrá.