El Concello de Silleda instará a las autoridades sanitarias la realización de un cribado entre los vecinos en vista del alarmante aumento de casos de COVID-19 durante la última semana, pues el sábado pasado había 17 contagiados en el municipio. Ayer eran ya 57 los diagnosticados, diez más que la víspera y cuarenta más que hace una semana. Y la incidencia acumulada también se dispara. Según los datos facilitados por el Servizo Galego de Saúde, en los últimos catorce días se detectaron 58 positivos nuevos, con lo que la tasa se sitúa en torno a los 650 casos por cada 100.000 habitantes. Es casi el doble de la media gallega, que ronda los 350, y muy superior incluso a la general de España, que está hoy en 575.
El aumento es “alarmante”, en palabras del alcalde trasdezano, Manuel Cuiña. “Por eso, pedimos que desde las autoridades sanitarias se tenga en consideración la realización del cribado”, añade el regidor, que conmina a la ciudadanía a moverse lo menos posible para evitar la propagación del virus. A la espera de la decisión que adopte mañana, lunes, el comité clínico de la Xunta de Galicia, Cuiña advierte de que la adopción de medidas como la realización del cribado –como ya se hizo en otros municipios del entorno, caso de Rodeiro o del valle de Vea, en A Estrada–, puede resultar beneficiosa para tratar de frenar la preocupante expansión de los contagios.
Asimismo, el regidor apela a la responsabilidad para cumplir las normas establecidas. “La situación es muy complicada”, insiste un Cuiña que padeció en sus propias carnes una enfermedad de la que todavía arrastra secuelas. Su gobierno ha puesto en marcha medidas complementarias, dentro de las competencias municipales, para clausurar todas las actividades que no se consideran esenciales en los centros de su titularidad durante los próximos quince días.
Manuel Cuiña lamenta el fallecimiento de una vecina de Escuadro, acaecido el pasado jueves en el Hospital Clínico de Santiago, en donde la mujer, de 88 años, estaba ingresada con patologías previas. A esta muerte hay que sumar la de otro dezano diagnosticado con coronavirus: Un octogenario de Dozón que expiraba ayer en el mismo centro hospitalario, según indicaron fuentes municipales.
La incidencia acumulada en este municipio se mantiene entre 150 y 250, igual que en Lalín, Vila de Cruces, Cerdedo-Cotobade –con once enfermos, uno más que en días pasados– y,según la actualización de ayer de la Xunta, ahora también ya Forcarei, que sigue registrando contagios después de varias semanas libre de coronavirus. En concreto, Lalín ronda los 170 casos por 100.000 habitantes, pues son 34 los positivos diagnosticados en los últimos catorce días con médico en su territorio. Pero no solo crece la incidencia acumulada, sino que lo hace también el número de casos activos, que ayer era de 37, dos más que el viernes, cuando ya había repuntado en idéntica proporción. Los actuales 37 enfermos constituyen no solo su récord puntual de la tercera ola –supera los 36 del lunes pasado–, sino también su cifra más alta desde el 1 de diciembre, cuando se habían notificado 44.
De los restantes municipios, Agolada es el que presenta la mayor incidencia, por encima de los 250 por 100.000 habitantes, con al menos once contagios activos. Entre los infectados con el virus SARS-CoV-2 continúan el alcalde, Luis Calvo, y un trabajador municipal. Otras catorce personas, entre miembros del gobierno y personal del Concello, han sido citados para una segunda PCR en Santiago entre el lunes y el miércoles, después de que en la primera, practicada en Melide, dieran negativo. Rodeiro presenta la menor incidencia, por debajo de 150.
A Estrada suma nueve casos en un día y llega a los 55, con más de 250 vecinos en cuarentena
El segundo territorio con más enfermos, aunque con más del doble de población que Silleda, es A Estrada, con 55, nueve más que el viernes. Su incidencia acumulada rebasa los 300 casos por 100.000 habitantes, pues suma 65 nuevos positivos en las dos últimas semanas. Tras incorporar esta decena de contagios, la media de edad de los casos activos en el municipio estradense se sitúa en los 38 años, registrando tres brotes y con cuatro pacientes en ingreso hospitalario, uno en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). Estos 55 casos ocasionan que más de 250 vecinos del municipio estradense deban permanecer en estos momentos en cuarentena. El jefe de servicio de Atención Primaria, Juan Sánchez Castro, no ocultó ayer su impresión de que la situación es “preocupante”. “Las fiestas han actuado como mecanismo de irradiación silenciosa, como un microcosmos de eventos supercontagiadores que han provocado que el virus pulule de forma diseminada”, apuntó. Señaló la tasa de positividad del 10% que corresponde a Galicia, estando A Estrada ligeramente por encima del 5%, si bien no descartó que esta todavía pueda subir en los próximos días. “Se ha demostrado que actuar de forma laxa por razones económicas tiene un efecto paradójico: a menor intensidad de medidas, más acaba sufriendo la economía, se ve menos afectada pero por mucho más tiempo, con lo que el impacto es mayor”, valoró. En opinión de este facultativo, sería el momento de actuar “de manera radical”. “Un confinamiento severo de tres semanas y aprovechar después para acelerar el proceso de vacunación”, planteó. En relación a las vacunas, consideró que, aunque es una decisión personal, cuando llegue el momento sería conveniente hacerlo “porque las vacunas son efectivas y seguras”. Defiende que habría que hacerlo rápido por tres motivos principales: para protegerse individualmente; para proteger a la comunidad al llegar a la inmunidad de rebaño y para evitar que el virus mute. “Así podremos recuperar cierta normalidad”, auguró.
Récord en centros educativos, con 34 positivos
La situación epidemiológica se ha agravado también en los centros educativos y prueba de ello es el incremento de ocho casos en Deza y A Estrada durante la última jornada. El informe remitido ayer por la Consellería de Sanidade dejaba el total zonal en 34, todos ellos del área sanitaria de Santiago, pues en los colegios e institutos de Forcarei y Cerdedo-Cotobade, que pertenecen a la de Pontevedra, no consta ninguno. El incremento se da en los tres concellos más poblados. En Lalín hay trece contagiados en cuatro centros: Seis en el IES Ramón Mª Aller Ulloa, dos más que la víspera; cuatro en el Laxeiro, uno más; dos en el CEIP Manuel Rivero; y uno nuevo en el CEIP Xesús Golmar. En Silleda son once, dos más de los que figuraban en el parte del viernes: El Pintor Colmeiro repite con cuatro, pero surgen sendos casos nuevos en los dos colegios de la capital municipal, que quedan con tres cada uno; y hay otro en la guardería pública, que mantiene cerrada un aula de 0-1 años y a sus cinco bebés y tres maestras en cuarentena. En A Estrada aparecen dos nuevos positivos, que dejan su total en siete, repartidos entre cinco centros: Las novedades corresponden al IES Plurilingüe Antón Losada Diéguez, que ahora totaliza tres, mientras que continúan con uno el IES Nº1 y los colegios de Figueiroa, O Foxo y Manuel Villar Paramá. En Vila de Cruces se mantienen los dos que había en el IES Marco do Camballón y en Agolada, uno en su colegio.
Un trabajador del hogar residencial de Cerdedo
También surgen nuevos contagios en las residencias de ancianos de la zona. Al caso ya conocido de una trabajadora del geriátrico de Vila de Cruces se suma ahora otro del hogar residencial de Cerdedo-Cotobade. Precisamente, las residencias están a la espera de recibir la segunda dosis de la vacuna, que en el caso de la cruceña, que abrió la campaña en la comarca, aguardan para el próximo miércoles.
