Colegios e institutos de las comarcas de Deza y Tabeirós-Terra de Montes han trabajado con intensidad en el primer trimestre del curso que hoy termina para activar las aulas virtuales que les capacitarían para afrontar un hipotético confinamiento que los equipos directivos de los diferentes centros insisten en la necesidad de evitar a toda costa para no propiciar “una generación perdida”. Es la opinión que, por ejemplo, enuncia la directora del IES Aller Ulloa de Lalín, Xoana Mouriño, admitiendo que este año su centro parece “un cuartel” donde se aplican “medidas” preventivas del COVID a rajatabla que están dando buenos frutos. ”El único regalo que le pido a los Reyes es que estemos todos bien y que no tengamos que volver a confinarnos en casa”, asegura, porque –aunque su centro lo tenga todo preparado para ese adverso escenario– sería muy perjudicial para el alumnado, que estos meses se ha “portado de maravilla”. Un nuevo encierro en los hogares sería, asegura, “una tragedia” porque los alumnos no solo necesitan acceder a los contenidos que sus docentes cargan en el aula digital sino también relacionarse con sus iguales, la guía que les brindan los profesores y hábitos de estudio que en el domicilio es más difícil mantener pese a haber replicado ya los horarios espejo en la web del centro, como también hizo en el suyo el CEIP Ramón de Valenzuela de Bandeira (Silleda), según su coordinador de TICs, Antonio Álvarez.
Este se encargó de formar en aulas virtuales a sus compañeros, de acuerdo con el Centro de Formación e Recursos, que también aprobó iniciativas similares en centros como el IES Antón Losada Diéguez de A Estrada de la mano del profesor de Informática del centro, Ricardo Feijóo, según detalló el director José Manuel Puente, o con el docente Alberto Bernárdez en el CEIP O Foxo, según la directora, Rosa Ferreira. El profesorado está muy concienciado en la necesidad de formarse en herramientas digitales.
Por eso, centros como el IES Pintor Colmeiro de Silleda o el CEIP de Bandeira han centrado en ellas su plan de formación permanente, al igual que el IES Número 1 de A Estrada, en el que 18 de sus 23 docentes –la mayoría con destino definitivo en el centro, según su director, José Manuel Piñeiro– participan por cuarto año consecutivo en un plan formativo digital centrado esta vez en la docencia virtual.
También todos los profesores del IES Chano Piñeiro de Forcarei, los del IES Marco de Camballón de Vila de Cruces y los del IES Manuel García Barros de A Estrada en Secundaria se forman en aulas virtuales, materia por la que el 80% de los docentes de este instituto estradense ya llevaban varios años instruyéndose según la directora, Ana Fernández.Lo mismo han venido haciendo los maestros de los colegios estradenses Figueiroa, Pérez Viondi, Villar Paramá de Souto de Vea, Manuel Cabada Vázquez de Codeseda, O Foxo y Oca; el forcaricense Nosa Señora das Dores; el de Soutelo; el de Cerdedo; o el CPI Rodeiro. La mayoría de los docentes ha evolucionado de un nivel de manejo básico a uno avanzado.
Y, paralelamente, ha aprovechado el trimestre para formar a sus alumnos para utilizar el aula virtual, dándoles de alta como usuarios, enseñándoles a acceder con su contraseña y a ganar conocimientos en la utilización de procesador de textos y la bajada o subida de documentos a un entorno virtual por si acaso se impone un nuevo confinamiento. También muchos centros han formado a los padres. Los de Figueiroa iniciaron ayer su formación virtual.
La gran mayoría de los centros ha montado sus aulas virtuales con las herramientas institucionales aportadas por la Xunta. Así, casi todos usan tecnología Moodle o el Edixgal para quinto y sexto y para primero y segundo de Secundaria. A mayores, disponen de tecnología CiscoWebex y Falemos –Meet, una alternativa para la teledocencia– para videoconferencia. Pero otros mantienen la tecnología con la que ya trabajaron el curso pasado, como los concertados NS Lourdes de A Estrada y CPR María Inmaculada de Silleda, que ya venían trabajando desde el pasado curso con aulas virtuales de tecnologías alternativas como Teams de Microsoft en el caso del centro silledense, o Google Classroom en el de los institutos Laxeiro de Lalín y Pintor Colmeiro de Silleda. El dezano empezó a manejarlo en el confinamiento.
Este y el temor a que un rebrote cierre aulas o incluso centros enteros ha llevado a docentes, alumnos y familias a extremar la prudencia. Los docentes defienden que las clases presenciales son necesarias porque contribuyen a la “igualdad de oportunidades” entre estudiantes. Un grave problema en caso de que se imponga otro confinamiento lo sufrirían los estudiantes que residen en los numerosos puntos del rural de ambas comarcas que carecen de conectividad. Es lo que señalan, por ejemplo, desde los institutos Número 1, Pintor Colmeiro y Chano Piñeiro. El director de este, Anxo Fernández, apunta a las “limitaciones técnicas” que padece el municipio. Urge más y mejor conectividad. Incide en que lo que menos le preocupa es no poder usar herramientas como la videoconferencia sino cómo hacerle llegar contenidos a jóvenes con “dificultades para recibir un mensaje de Abalar móvil y hasta de WhatsApp”. Comparte su preocupación por las nuevas tecnologías el director del colegio Nosa Señora das Dores, que indicó que el centro aprovechó la concesión del plan Edixgal para quinto para renovar sus aulas de informática. Cambiaron los equipos de sobremesa por otros portátiles, que puedan ceder a las familias en caso de necesidad.
Es una medida preventiva de la huella del COVID en las familias más desfavorecidas en un curso que arrancó temiendo que el coronavirus se extendiese en las aulas pero en el que los centros han sido entornos seguros. Los casos de COVID han sido contados y controlados, gracias a la prudencia de las familias. Se contabilizan menos faltas de asistencia que nunca. Así lo destaca el director del CEIP Nosa Señora das Dores, que atribuye al uso de mascarillas y a la ventilación constante de las aulas que este año esté habiendo menos gripes que nunca. La pena es que la pandemia ha vuelto digitales muchas interacciones –como la participación del IES Laxeiro en un programa Erasmus con otros centros de Polonia, Grecia, Malta, IIalia y Portugal– e impide clásicos de los centros como los viajes de fin de curso que, por ejemplo, el IES Aller Ulloa realizaba con alumnos de prácticamente todos los cursos. Su directora promete retomarlos tan pronto como el COVID remita.
Cabalgata y Papá Noel sin contacto, festivales en vídeo, música a distancia o concursos de postales cierran el trimestre
La pandemia lo condiciona todo en los centros educativos de las comarcas hasta el punto de que, por ejemplo, será la primera vez en 50 años que el NS Lourdes no cuente con su concurrido festival de Navidad. En este centro, al igual que en otros como O Foxo, Oca o San Xoán Bautista de Cerdedo han apostado por realizar festivales digitales, editando vídeos para componer un vídeo que hoy los alumnos visionarán con sus compañeros, pero en sus respectivas aulas. Sin embargo, Papá Noel, los Reyes Magos y sus pajes también han querido dejarse ver –de lejos y sin contacto con los escolares– en distintos centros educativos en estos días. El viernes los pajes de los Reyes recogieron cartas en el colegio Villar Paramá de Vea, ayer fueron Santa Claus y los Magos de Oriente los que se dejaron ver en una cabalgata conjunta destinada a los niños de la Escuela de Educación Infantil de Donramiro. Y al colegio de Forcarei, al que cada año se acercaba Papá Noel de la mano de la ANPA, este año Santa llegó en formato de vídeo. Eso sí, les mandó regalos. Por su parte, el Pérez Viondi y el CPI Rodeiro participaron en concursos de postales. El IES Laxeiro contará hoy con música a distancia y el Marco de Camballón, con un festival de cortometrajes. Por todo lo alto lo despedirán los colegios de Soutelo y Forcarei, donde esta mañana actuará Cé Orquestra Pantasma. Previamente, los niños del colegio de Forcarei disfrutarán de una proyección de Navidad con palomitas y refresco y de chocolate con rosca.
