Las agrupaciones socialistas de Deza mantuvieron una reunión telemática con el secretario general provincial, David Regades, para analizar el proyecto de presupuestos de la Xunta y canalizar la recogida de propuestas para enmendar unas cuentas “que fallan en lo fundamental, o sea, la atención a las personas y a los territorios en función de sus características”. “La absoluta falta de compromiso con las políticas sociales, el abandono de los centros de salud y de los colegios, la paralización durante décadas de las concentraciones parcelarias y la ausencia de proyectos para el desarrollo del sector primario, especialmente potente en la comarca, son las grandes carencias de unos presupuestos malos, crueles y extremadamente partidistas –remarca Regades–, en la medida en que sólo incluyen partidas con nombres y apellidos en función de la cuerda política del alcalde o alcaldesa”.

El secretario provincial del PSdeG adelanta que “la verdadera recuperación” llegará por los fondos europeos que “afortunadamente capitanea el Gobierno de España y eso va a garantizar un reparto equilibrado, porque si dependieran de la Xunta, ya sabemos lo que pasaría”. Por tanto, invita a los responsables comarcales a trabajar con todos los agentes sociales para ser capaces de presentar proyectos que pongan en valor toda la potencia del sector primario en el territorio dezano.

En el encuentro participó el diputado autonómico Julio Torrado, que apuntó que los presupuestos solo traen inversiones nominales para Lalín y demuestran “la polarización” de la comarca, dividida entre este concello, para dar imagen de apoyo al gobierno local del PP, y el resto. Las tres partidas territorializadas consisten en 9 millones de euros para el CIS; 1,5 millones para el polígono Lalín 2000 y 1,8 millones para el enlace de la AG-53 con la N-525 en Dozón. Aduce que la partida del nuevo centro de salud “es imposible de ejecutar en un único año” y está “pintada” en las cuentas “para vestir” a José Crespo y la del parque empresarial es “genérica y no se concreta su finalidad”. Y se pregunta cuánto tendrá que aguardar Silleda para disponer de un acceso digno a la AP-53.

El malestar fue verbalizado especialmente por el alcalde de Silleda, Manuel Cuíña, quien califica estas cuentas como “vergonzosas” y “una demostración más de desprecio institucional que se manifiesta cada vez que las y los consejeros vienen a Lalín y los coches oficiales pasan de largo”. “Son más de lo mismo: como si no existiéramos”, declara el regidor, que lamenta que el Concello tenga que “seguir trabajando solo, sin ninguna colaboración institucional de un gobierno gallego que desprecia a Silleda y al resto de los municipios de la comarca”.

Cuíña recuerda que el CEIP de Silleda, con 450 alumnos y construido hace más de 50 años, ha agotado su vida útil, por lo que sería necesario un nuevo edificio. Carece de un patio cubierto en el que los niños puedan jugar o hacer actividades y tiene unos aseos “lamentables”, en los que la Consellería de Educación tiene pendiente una inversión de 40.000 euros desde hace tres años. El viejo edificio, en el que hasta hace poco llovía en el comedor, “va tirando” con las inversiones que hace el ayuntamiento. Un abandono que extiende a otras dotaciones de competencia autonómica, como la escuela infantil o el centro de salud, igual que “tampoco quisieron hacer una residencia, que era muy necesaria y tuvimos que impulsar también desde el Concello”. Hay carreteras autonómicas sin rematar, como la de Vila de Cruces a A Bandeira, y otras en “estado desastroso”. Finalmente, destaca la negativa reiterada de la Xunta a incluir a Silleda en el área de Transporte Metropolitana de Santiago: “Ni siquiera contestan a nuestras solicitudes, en una absoluta falta de respeto”, declara.

Escepticismo en Lalín

La secretaria general del PSOE en Lalín, Alba Forno, puso voz al “escepticismo” de las previsiones, “anunciadas para dar cobertura política al alcalde, pero sin visos de llevarse a cabo”. Considera que los 9 millones para el CIS “son imposibles de ejecutar” y reclama que la Xunta asuma la titularidad y la gestión del Conservatorio, que acoge alumnado de toda la comarca, por lo que “debe ser considerado como una competencia municipal impropia, algo que el Concello debería estar liderando, pero no hace”.

Mari Carmen Silva, desde Vila de Cruces, lamenta el estado de los colegios Nosa Señora da Piedade y Cerdeiriñas, en Piloño, así como la urgencia de la parcelaria de Toiriz, que ya motivó recogidas de firmas y varias peticiones municipales, sin respuesta. Las parcelarias, “bloqueadas desde hace demasiados años”, fueron otro de los asuntos planteados por los socialistas dezanos, pues “impide el asentamiento de proyectos empresariales que siguen aguardando y, por tanto, puestos de trabajo que no se crean”.