El Concello de A Estrada ultima el borrador de su futuro Plan de Accesibilidad Universal Urbana, un documento que cifra en 1.236.237,50 euros las actuaciones necesarias en todo el casco urbano para garantizar la accesibilidad a todos los espacios públicos de la villa. Así lo confirmó el edil de Urbanismo, Gonzalo Louzao Dono, anticipando la intención del gobierno local de convocar mañana una comisión de Urbanismo para abordar el estudio de dicho borrador y, si es posible, llevarlo ya al pleno de diciembre para su aprobación.

Elaborado por Idom en los últimos meses, su punto de partida fue el Plan de Movilidad aprobado en abril contemplando en distintas fichas las necesidades detectadas en materia de humanizaciones para seguir ganando espacio para el peatón y establecer aparcamientos disuasorios para dejar los vehículos y establecer itinerarios como, por ejemplo, los Caminos Escolares Seguros. En ese Plan de Movilidad se incidía en la existencia de problemas de accesibilidad y falta de sinaléptica en partes de la villa y se apuntaba la necesidad de contar con una normativa municipal en materia de accesibilidad. El borrador elaborado en atención a ello refunde la normativa estatal y autonómica al respecto.

Además, delimita 36 espacios urbanos en la villa para, acto seguido, realizar una descripción actual de su estado, una identificación de sus deficiencias y una propuesta de solución. En prácticamente todas las calles de la villa detecta algún problema de accesibilidad, cuya subsanación ya cuantifica. La avenida de Benito Vigo (que divide en 5 tramos) es la que más inversión precisa: 257.217 euros. Le siguen los dos trechos establecidos en la Avenida de Santiago, con un montante global de 95.760 euros.

En tercer lugar por coste se sitúan los dos trechos de Pérez Viondi, cuyas estrechas aceras pidió ensanchar la ANPA para evitar que –ahora el centro ha implantado la entrada escalonada de alumnos a distintas horas– los padres que vienen de dejarlos en el colegio y los que aun los llevan coincidan de frente con el consiguiente riesgo de contagio. La estrechez de las aceras de Pérez Viondi ya se abordó el jueves en la Mesa de Movilidad. El gobierno explicó que se le ha encargado un informe a la Policía Local, habida cuenta de la sobrecarga de tráfico extra procedente de la N-640 que asumirá Pérez Viondi cuando se humanice y peatonalice Serafín Pazo antes de final de año. Ese tráfico extra plantea también un problema al ensanche puesto que si se ensanchan las aceras habría que suprimir el aparanEl nuevo documento apunta también a la existencia de “múltiples obstáculos en las aceras, que carecen así de la accesibilidad precisa. En cualquier caso, es algo susceptible de estudio, añadió Louzao. De momento, el Plan de Accesibilidad Universal Urbana cifra en 80.505 euros la inversión precisa para subsanar sus deficiencias..

A 66.922,50 ascienden los de los dos tramos de Serafín Pazo, seguidos de los 58.247,50 que se necesitan para acondicionar la Rúa San Paio. Se sitúan a continuación por orden de importancia 25 de Xullo (54.730 euros), Avenida da Torre (44.455), Avenida de Ponteareas (44.357,50), Avenida de América (43.345), Gradín (43.140), las calles Justo Martínez e Iryda (43.095), San Antonio (40.530), Avenida de Vigo y Fermín Bouza Brey (39.520), la Avenida de Leicures en la que arranca la PO-213 y la Travesía Leicures (38.765), la Rúa Matadoiro (37.715), el conjunto Rúa Cruceiro-Travesía de Vea-Travesía da Igrexa (33.920), la calle Alfonso Rodríguez Castelao (32.362,50), las antiguas rúa Capitán Bernal y Praza de Martínez Anido –actual praza do Mercado– (24.880), la Praza da Inmaculada y la Rúa 24 (24.205), la rúa Manuel García Barros (22.512,50), la calle Olimpio Arca Caldas –antes denominada Rúa 36– (21.315), la Praza Campo da Feira y sus calles adyacentes (21.140), el Campo y Travesía da Feira con sus calles adyacentes (18.800), la calle Padrón (17.087,50), la rúa Virxinia Pereira antes denominada con el númer 35 (13.840), la calle Peregrina (7.165), Calvo Sotelo (4.420), Waldo Álvarez Insua (3.485) y, por último, la Praza de Galicia –más conocida como la Praza da Farola– con actuaciones pendientes por valor de 2.800 euros.

Según explicó el edil de Urbanismo, el gobierno pretende llevar el borrador de Plan de Accesibilidad Universal Urbana a la comisión de Urbanismo para que los distintos grupos puedan realizar sus aportaciones y después someter el documento a su aprobación en pleno. Alineado con la estrategia Edusi en materias tales como la economía baja en carbono o en ganar espacio para el peatón, pasará a ser normativa de aplicación municipal y, por tanto, cualquier futuro proyecto de humanización que se acometa en el casco urbano deberá respetar sus directrices.