Vecinos y usuarios de una pista asfaltada que une las parroquias silledenses de Taboada y Vilar cuestionan su limitación de velocidad a 30 kilómetros por hora y la instalación de bandas reductoras. Se trata de un vial que parte de la N-525, en la recta de Taboada, y desemboca en el acceso a Vilar y al polígono empresarial Área 33. “No es un tramo de pista que tenga razón de limitarse a esa velocidad”, señala un usuario, que se hace eco del “malestar” manifestado por “mucha gente” al Concello, sin haber recibido “ninguna respuesta ni razonamiento al por qué de este sinsentido”.
