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De barreras, controles y pasos en barco

Son muchas las fronteras que delimitan la movilidad de los municipios de las comarcas en tiempos del coronavirus. A Estrada extendería sus límites para circular libremente hasta Teo, Vedra, Padrón o Boqueixón,concello al que también podría ir Silleda hasta Boqueixón; Vila de Cruces hasta Boqueixón, Touro, Arzúa y Santiso: Agolada tedndría sus fronteras en Santiso, Palas de Rei, Antas de Ulla; Rodeiro en Chantada, Carballedo, San Cristovo de Cea y Piñor; Dozón en Piñor y O Irixo; Lalín en O Irixo y Forcarei en Beariz.

Para muchos municipios de la zona Santiago es la referencia sanitaria. Experiencias como la vivida por una vecina de Silleda demuestran las situaciones que se producen en el alto en el camino que suponen los controles policiales. Con su padre ingresado en la UCI y con la posibilidad de ir a visitarlo solo una vez al día, antes de llegar a la hora marcada para la primera de ellas, esta silledense tuvo que detener la marcha en un dispositivo de vigilancia, instalado justo en el lugar donde un gran cartel anuncia el paso a la provincia de A Coruña. "No tenía ningún permiso. Me dijeron que pidiese un justificante en el hospital porque a la vuelta me lo iban a pedir, pero ya no estaban", explica. En los 15 días que lleva realizando el recorrido para ver su padre la media hora permitida nunca más volvieron a pedirle que detuviese el vehículo, donde ahora lleva como oro en paño el "salvoconducto". Esta vecina de Silleda es consciente de que simplemente le hicieron una advertencia, subrayando que, con la norma en al mano, podrían haberla multado.

En el embalse de Portodemouros la comunicación interprovincial por agua continúa operativa. Entre Loño (Vila de Cruces) y Beigondo (Santiso) no se interrumpió el tránsito de la barcaza. Naturgy entiende que podía considerarse esencial el servicio en esta crisis y tampoco limitó su horario.

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