Son solo un par de minutos al día. No mucho más de 120 segundos en los que salir a gritar, cantar y aplaudir a ventanas y balcones, primero para infundir ánimos a todos aquellos que trabajan estos días para que todos podamos despertar pronto de esta pesadilla y, segundo, para recordarle al silencio que se ha adueñado de las calles que tiene los días contados. Cada pueblo y cada barrio tienen estos días su anécdota de balcón, su particular banda sonora. Los vecinos de Soutelo de Montes, en Forcarei, han creado la suya propia. Cuando el reloj marca las 20.00 horas, la Muiñeira de Chantada, la famosa pieza de Avelino Cachafeiro, se deja escuchar en la tierra del célebre Gaiteiro de Soutelo.
La iniciativa partió de la asociación de vecinos O Can de San Roque. Valiéndose de un megáfono, comparten con toda la villa la obra de Cachafeiro interpretada por la Banda de Gaitas de Forcarei, como no podía ser de otro modo.
Antes de que las agujas se aproximen a la hora marcada, los grupos de Whatsapp empiezan a animar a los vecinos a ir tomando posiciones en la ventana. Uno de los ellos toca la "choca", una especie de cencerro, para dar el aviso de que llega el momento de rasgar el silencio. Es la llamada a los balcones, a la que cada día responde más gente.
La propuesta comenzó de modo tímido, con media docena de soutelanos, pero la cosa se fue animando. Y subiendo. "La media de edad de los vecinos en Soutelo es avanzada y este es un modo, también, de saber que están todos bien", explica Natalia Doval, integrante de O Can de San Roque.
De hecho, la excusa de salir a esta hora a la ventana brinda a los vecinos la ocasión de ir "chillando por barros", preguntándose unos a otros si todo marcha como debe. Esta particular evaluación hace que, si alguien falta a la cita de las ocho en las ventanas, sus vecinos tiren de teléfono para confirmar que todo esté bien.
Y las ocho de la tarde fue la hora a la que ayer buena parte de los silledenses salieron a sus balcones y ventanas para, con el teléfono en mano y con el volumen al máximo, sonase la popular Resistiré, del Dúo Dinámico, pero interpretada por miembros de la Banda de Música Municipal de Silleda. La formación que dirige Rafael Agulló preparó durante el fin de semana un emotivo vídeo de más de cuatro minutos de duración, con cada integrante tocando la pieza desde su casa, y que sin lugar a dudas es, y será, un balón de oxígeno y voluntad para estos días que quedan de confinamiento.
Por su parte, el grupo tradicional Os Trazantes de Tenorio compuso la canción "Non saias" para concienciar a los vecinos de Cerdedo-Cotobade y a toda la gente de la importancia de quedarse en casa para luchar contra la transmisión del coronavirus, además de para mandar un mensaje de ánimo a la población en medio de esta crisis sanitaria.
Ante la imposibilidad de mantener los ensayos, la agrupación propuso a sus miembros y a los niños que cantase, desde sus domicilios, unas coplas para versionar una canción muy conocida. El trabajo acabó desembocando en este tema, concebido como un canto de lucha y esperanza. Cada vez se sumaron más participantes, conformando una especie de videoclip que ahora quieren compartir con la sociedad en estas horas de confinamiento. El videoclip puede visualizarse en la web de Youtube.
