Tras el paso de los temporales y el anegamiento producido por la crecida del Ulla y la apertura del aliviadero del pantano de Portodemouros, las Insuas de Gres vuelven a emerger a la superficie y, con ellas, todos los destrozos causados por el arrastre del agua. Los puentes de acceso al área recreativa tienen severos daños, con postes arrancados, troncos de árboles y ramas que quedaron depositados sobre las pasarelas o, también, sobre el propio curso del río. Aunque el pantano seguía vertiendo anteayer, el Ulla poco a poco va bajando de cauce y al menos ya permite pasar por la capilla del Carmen y acercarse a las Insuas, aunque el tránsito a pie por toda el área recreativa aún no es recomendable, dada la fragilidad del terreno.