La jornada dominical lalinense se completó con deporte, música y comida. El programa Cruce de Camiños englobó una ruta por la Vía da Prata de unos seis kilómetros. El inicio se realizó en el albergue da Laxe y finalizó en la Ponte Taboada. Después de más de dos horas caminando, a los participantes ya se les abría el apetito, por lo que pudieron disfrutar de una degustación de productos de la zona.

El grupo Mayalde fue el encargado de poner el toque musical a la jornada dominical. Consiguió que los asistentes a la degustación de productos pudieran deleitar sus oídos con sus notas musicales. El grupo de música tradicional, en su repertorio, mezcla un sabor ancestral. Hace 38 años que se especializó en la recuperación de la música del alma, mezclando la vida y el arte. La originalidad que mostró en Lalín es su esencia, que a través de las historias que escucha de personas mayores las transforma en piezas musicales, una forma de que quede en la memoria de los que escuchan su música, y así quedará en la cabeza de muchos lalinenses.

El programa quedaba cerrado con esta actuación musical, a la espera de que muchos pudieran conocer la belleza de los caminos que transcurren por la zona: Camiño de Inverno y Vía da Prata. Fueron una serie de actividades que servirán para elaborar un guión de ambas rutas.

Roteiros

Por otro lado, los Roteiros de Lalín recibió a 50 peregrinos de Monforte, encabezados por la presidenta de la Asociación do Camiño de Santiago por la Ribeira Sacra, Aida Menéndez. Realizaron un tramo del Camiño de Inverno, desde la Ponte do Pedroso hasta Lalín. El investigador Daniel González Alén fue el encargado de hacer de guía para darles a conocer la iglesia de Lalín de Arriba. Después de disfrutar de una comida en la zona, visitaron las mámoas de Alperiz.