El gobierno presentó fuera del orden del día un expediente de modificación de crédito de 373.534 euros, destinados a la urbanización de la parcela que albergará el futuro Centro Integral de Saúde (CIS), en Alto de Vales. De esa cifra, 14.942 se asignan a la redacción del proyecto y la dirección de obra, mientras que los 358.592 restantes costearán la ejecución de la misma. Las tres fuerzas de la oposición dieron su apoyo al equipo de Crespo, no sin antes indicar que la consellería no podía tener un cheque en blanco y seguir sin concretar inversiones, detalles y plazos para la construcción del centro asistencial que sustituirá al ambulatorio.

Marcha atrás de Blanco

Compromiso pidió la instalación de puntos informativos sobre violencia de género en fiestas como las de Lalín o Donramiro, un asunto que debería liquidarse en segundos, aunque los grupos deseasen razonar sus motivaciones. La edil delegada de Igualdade, Begoña Blanco, anunció su voto contrario por, en términos generales, entender que el gobierno pondrá en marcha políticas activas en esta dirección. Pero además de asegurar que no pudo contar con la colaboración de un colectivo feminista citado en la moción, deslizó que Compromiso habría utilizado a funcionarios para la elaboración de esta propuesta por la coincidencia en fechas de ciertos episodios. Ahí la oposición afeó a Blanco por acusar a Azos Feministas de ser supuestamente un colectivo "sectario y partidista" y pidió a la edil de Cercio que pensase seriamente en cambiar el rumbo de su argumentación. Alba Forno (PSOE) dijo que iniciativas como estas, se consensuaban con Paz Pérez como edil delegada. Blanco comenzó a dudar y dejó caer que su voto sería favorable. "Decide tú", le dijo Crespo y al final hubo unanimidad.