En el distrito XVI, que abarca los municipios de Deza y Tabeirós salvo Cerdedo (al fusionarse con Cotobade pasa a depender del distrito de Caldas-O Salnés), hay 130 montes vecinales en mano común y otros 38 de gestión pública. Durante el año pasado, en todos ellos el aprovechamiento de madera ascendió a 292.303 metros cúbicos (m3) según el primer Anuario de Estadística Forestal que acaba de difundir la Consellería de Medio Rural. Es como si produjesen el equivalente a 292,30 millones de litros de agua.
Este informe permite conocer qué tipo de madera se saca de los montes, cuáles tienen un plan de ordenamiento forestal o si incorporan proyectos micológicos, entre otras cuestiones. Así, por especies, de los 292.303 m3 de madera cortados, 166.899 corresponden a diversas variedades de pino y 13.268 son de otras coníferas como abetos, cipreses o cedros. Dentro de las frondosas, tiene especial importancia la producción de eucalipto, con 97.453 m3 de aprovechamiento. Eso sí, en el distrito XVI el eucalipto supone el 33% de la producción maderera total. El porcentaje está en consonancia con otros distritos del interior gallego (en el vecino de O Ribeiro es del 22% y en Terra de Lemos, al que pertenece Chantada, del 7%). Por eso, dista mucho de la producción de eucalipto en Ferrol, con 1,1 millones de m3 (es el 89% de su madera total) o de Caldas-O Salnés, con 278.681 m3 (el 76% del total).
De esos más de 292.000 m3 de madera, solo 968 proceden de montes de gestión pública, en los que se talaron pinos y eucaliptos. A escala gallega, en estos montes que gestiona la administración se retiraron 355.100 m3 de madera. En los privados, la cifra gallega se dispara a los 9.716.425 m3. En los montes públicos destacan los aprovechamientos en los distritos de Verín-Viana, Terra de Lemos y Vigo-Baixo Miño. Sin embargo, lideran el volumen de solicitudes para cortar en montes privados los distritos de Ferrol y A Mariña Lucense, en coníferas, aunque éste también encabeza el aprovechamiento de frondosas, seguido por Lugo.
En la escala de los 19 distritos forestales, el de Deza-Tabeirós ocupa el 12º puesto en cuanto a aprovechamiento forestal. Es la misma clasificación que ocupa a la hora de hablar de repoblaciones con inversión pública. Volvieron a plantarse especies arbóreas en 18,02 hectáreas, muy lejos de las 444 que se reforestaron en A Limia o las 122 de O Ribeiro. De esas 18 hectáreas, 17,7 son de coníferas. No hay datos por distrito, pero sí por provincia: en la de Pontevedra, hubo 50 infracciones por plantaciones ilegales entre 2016 y 2018, y otras 38 por incumplimiento de otras distancias. Al margen de las infracciones, las autoridades forestales realizaron 252 apercibimientos por estas cuestiones.
Al margen de la madera, el monte tiene otros usos como pastos o producción de setas. Ninguno de los dos casos tiene especial impronta en el Distrito XVI. El año pasado, solo hubo un monte vecinal que reguló el uso de pastos, sobre 638,79 hectáreas. En toda la provincia se contabilizan 11 montes, y en Galicia son 26. En las dos comarcas, dos montes tienen prohibición de pastos. Son, en ambos casos, comunales y abarcan 290 hectáreas.
En cuanto a los aprovechamientos micológicos, ni en Deza-Tabeirós ni en toda la provincia se tramitaron solicitudes para acotar terrenos en los que producir setas. Hay 19 casos repartidos por las otras tres provincias, en los distritos de Bergantiños; Santiago; Barbanza; Lugo-Sarria; Terra Cha; Valdeorras-Trives y Verín-Viana. Afectan, en conjunto, a 7.945 hectáreas.
