La empresa cruceña Industrias Guerra sale al paso de las declaraciones del exregidor, Jesús Otero sobre problemas sobre la catalogación del suelo en su finca, así como del propio PP vertidas en mayo sobre la imposibilidad de ampliar sus instalaciones en base a informes técnicos y jurídicos municipales. La firma esgrime que la dificultad se deriva del traslado del suelo industrial al polígono de Aguillos, de modo que las fincas que quedaron enfrente de la zona de Guerra y de Hitraf pasaron a ser suelo rústico. Fuentes de la empresa indican que durante 30 años quedaron "desamparados para legalizar la situación", que se convirtió en un bucle. No podían disponer de licencia porque estaban sobre terreno rústico. Esto les impidió acceder a subvenciones, hasta 2013, cuando legalizaron la situación. Pero ahora, al intentar ampliar instalaciones y precisar en torno a unos 5.000 metros, el polígono más cercano era Silleda. Allí Industrias Guerra pudo establecerse en mes y medio, y ahora mismo cuenta con 12 trabajadores en esta sección.