El simulacro de accidente con dos heridos e incendio en el túnel de la autopista AP-53 a su paso por la parroquia estradense de Oca motivó una intensa mañana de trabajo para los efectivos de emergencia que prestan servicio en las comarcas de Tabeirós-Montes y Deza. El ejercicio simulado comenzaba al filo de las 10.35 horas, cuando -de acuerdo con el ejercicio simulado previsto- personal de mantenimiento del vial de alta capacidad alertaba al 112 de que, a través de las cámaras radicadas en el túnel, se tenía constancia de la existencia de la colisión entre dos turismos con incendio posterior en el interior del túnel. De inmediato, además de movilizarse el personal de mantenimiento, desde el 112 se alertaba a Servizo de Emerxencias de A Estrada, al Parque Intercomarcal de Bombeiros de Deza-Tabeirós-Montes, a la Guardia Civil de Tráfico de Lalín y a una ambulancia medicalizada del 061 con base en Santiago.

Todos ellos se desplazaban hasta el punto de inmediato, movilizándose como si la incidencia fuese real. Mientras que Guardia Civil de Tráfico y personal de la concesionaria de la AP-53 procedían a desviar el tráfico a través de los pasos de mediana de la autopista hacia la calzada contraria, mediante un desvío provisional de tráfico debidamente señalizado, los bomberos del Parque Intercomarcal de Deza-Tabeirós-Montes con base en Silleda accedían al interior del túnel provistos de equipos de respiración autónoma, encargándose de la búsqueda y el rastreo de las víctimas. Localizados los vehículos y el foco del incendio, procedieron a realizar una breve extinción del foco con un extintor y realizaron una primera valoración del estado de las víctimas, en permanente contacto con los demás efectivos de emergencia. Valoradas las víctimas, se determinó que había una consciente y orientada con una fractura de cúbito y radio y otra inconsciente. Ambas fueron evacuadas del túnel con equipos de respiración autónoma, en camilla de palas una y en tablero espinal la otra. Durante este intervalo de tiempo, Emerxencias de A Estrada -que había acudido al punto con tres efectivos y la bomba urbana pesada- procedió a tirar una línea de agua de 260 metros, sumando 17 mangueras. Fue la línea que se usó para extinguir definitivamente el fuego. De la evacuación de los heridos se ocuparon los efectivos de la ambulancia medicalizada del 061. En el simulacro también había observadores del Ministerio de Fomento.

Al término del simulacro, en las oficinas de que dispone la concesionaria de la autopista en Vedra, tuvo lugar una reunión de valoración de este ejercicio simulado orientada a detectar posibles fallos para evitar que puedan reproducirse en una situación real. Al filo de las 13.00 horas todavía se seguía trabajando para restablecer la normalidad en el tráfico por el tramo afectado (del punto kilométrico 18,050 al 19,120 de la AP-53 en dirección a Santiago).