El concejal de Rural de Lalín, Miguel Medela, mantuvo esta semana un encuentro de carácter técnico para ultimar los detalles de la entrada en servicio de la depuradora de la parroquia de Zobra. Se trata, según informó en el día de ayer el gobierno municipal, de un trámite que se realiza una vez que los vecinas de parroquia ya se pueden conectar a la nueva red de saneamiento construida por la administración local. En ese encuentro de trabajo, además del edil responsable del proyecto, también participaron técnicos municipales, personal de la empresa concesionaria del servicio del agua -Espina y Delfín- así como responsables de la compañía que construyó la depuradora.

Así, desde hace unos días, los beneficiarios de estas actuaciones ya pueden enganchar a la nueva red de saneamiento, en la que el ayuntamiento realizó una inversión superior a los 200.000 euros: 144 mil euros para el alcantarillado y 60.000 destinados a la estación depuradora. Para poder hacer efectivo lo enganche a la nueva red, los vecinos de Zobra tan sólo deben cumplimentar un sencillo y rápido trámite: ponerse en contacto con la empresa concesionaria del agua para darse de alta en el servicio. A partir de ahí, serán los propios operarios de Espina y Delfín los que, una vez realizada esta gestión, procedan a llevar a cabo las actuaciones técnicas necesarias para que cada vivienda pueda activar la conexión a la nueva red de saneamiento. En cualquier caso, el ayuntamiento convocará en los próximos días al vecindario a un encuentro para explicarles en detalle todo el proceso y para resolver cualquier duda que puedan tener con respeto al mismo.

Este proyecto de saneamiento permite a los vecinos de los lugares de Zobra, Acebedo y Portela conectar sus viviendas a un nuevo alcantarillado, tal y como venían demandando desde hace varios años. Esta red cuenta con una moderna e innovadora Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) que es absolutamente respetuosa con el entorno y que alcanza una excelente purificación mediante la creación de humedales artificiales con plantas autóctonas que generan unos microoganismos encargados de eliminar los residuos.

Este proyecto no estuvo exento de polémica debido a la demora que tuvo. Cabe recordar que el gobierno local solicitaba, en marzo de 2016, una cuantía de 59.908 euros del Plan Concellos para la depuradora, iniciándose las obras a mediados de noviembre. Tras dos meses de trabajos, la adjudicataria presentó una solicitud de prórroga autorizada por el ejecutivo local, con fecha límite para el 20 de marzo del 2017. Ya en el mes de agosto del año pasado el Partido Popular criticaba el abandono de la infraestructura, una vez que la depuradora seguía sin funcionar un año y medio después de finalizar su construcción.