El Obispado de Lugo guarda silencio sobre la participación del sacerdote José Antonio García Otero en la candidatura de Coalición de Centro Democrático (CCD) en las elecciones municipales de Lalín. Desde la diócesis declinan pronunciarse, tras haber mantenido conversaciones con quien es su ministro en nueve parroquias del concello dezano. Pero se da por hecho que el obispo Alfonso Carrasco Rouco no tomará medidas contra el veterano párroco, que podrá seguir ejerciendo como tal.

García Otero ocupa el simbólico y honorífico último lugar (21º) de la lista que encabeza su sobrino, el edil no adscrito Juan José Cruz García. Aunque el Código de Derecho Canónino establece que los clérigos "no han de participar activamente en los partidos políticos ni en la dirección de asociaciones sindicales", en la práctica esta potestad recae sobre los titulares de las diócesis. En el caso de Lugo, su prelado habría aceptado las explicaciones dadas por su subordinado de que ocupa un puesto simbólico con la intención de respaldar a un familiar muy apreciado.

Éste defendió ayer el derecho de su tío a concurrir al proceso electoral como cualquier ciudadano y no dudó en equiparar el cargo de sacerdote con la raza o la orientación sexual de las personas. "Pensar que un negro, un gay, una mujer o un cura -por poner algunos ejemplos muy evidentes- no pueden ir en unas listas desacredita a quien piensa así", afirma Cruz, que concluye con un "no al racismo". "En estos asuntos son las leyes civiles las que rigen. ¿A quién le molesta? ¿Es racista/fascista? ¿Se esconde?", inquiere el concejal y líder de la candidatura. "Vamos a tener que hacer la fiesta del orgullo de ser religioso, porque parece que en Lalín no se respeta a los creyentes. Hay mucho racismo", proclama.

Presiones

El exedil de Compromiso por Lalín se muestra convencido de que hubo "presiones" al Obispado, extremo sobre el que tampoco se pronunciaron desde la diócesis lucense. "Alguno va de demócrata, pero por detrás intenta destruír -denuncia-. La preocupación de ese presionador confirma que vamos por el buen camino. Hay miedo a que los centristas sigamos sumando".