El conselleiro de Medio Rural, José González, anunció ayer la puesta en marcha de un plan del estratégico del sector lácteo gallego para continuar profundizando en la cadena de valor de este alimento. Hizo este anuncio en el marco de la clausura de las jornadas sobre la leche y sus perspectivas, que organizaron Unións Agrarias y la Unión Leiteira Galega (Ulega) en Santiago. En las conferencias participaron expertos gallegos y españoles de organizaciones sindicales, como Lorenzo Ramos, de la Unión de Pequeños Agricultores, amén de representantes tanto de la Consellería de Medio Rural como del Ministerio de Agricultura.

El titular de Medio Rural insistió durante la jornada en la condición de líder que tiene Galicia dentro del sector lechero nacional (produce en torno a la tercera parte del total, pero sin embargo sus ganaderos reciben el precio más bajo). Recordó que la producción lechera es uno de los principales motores económicos del rural gallego. Por eso, abogó por seguir impulsando la calidad de estas producciones, así como las del conjunto agroalimentario de Galicia, para lograr un incremento del valor añadido de sus productos. Añadió la necesidad de aplicar las nuevas tecnologías de I+D+i en la industria agroalimentaria para reforzar su competitividad.

González, durante su intervención, avanzó que el rural y el sector lechero gallego afrontará cuatro retos clave en los próximos años, como la reforma de la PAC, la profesionalización, la rentabilidad de las explotaciones y la mejora de su base territorial. En este sentido, desde Medio Rural se espera una PAC "fuerte, común y que mantenga e presupuesto actual, apostando por medidas que reconozcan la peculiaridad de nuestro territorio". La comunidad gallega necesita, en concreto, medidas que palien la oscilación en los precios de los productos agrarias, que acaban creando inestabilidad entre los productores. En lo que concierne a la profesionalización del sector, entiende que ésta ha de basarse en la formación y la innovación.

González abordó también la rentabilidad de las explotaciones, que debe apoyarse en la transformación de la materia prima, para la que la Xunta dispone de ayudas que en la última convocatoria apoyaron más de 90 proyectos agroalimentarios, con una aportación superior a los 30 millones de euros. De esta cuantía, el 59% fue para empresas lecheras. Por último , enfatizó las facilidades para la movilización de tierras, mejorando la concentración parcelaria para que las granjas puedan disponer de más base territorial.