Las obras de la segunda fase de reforma de la sede de la Policía Local de A Estrada se adjudicarán esta semana. Así lo confirmó ayer el alcalde de A Estrada, José López Campos, desvelando que se hará mediante un contrato menor dado que su cuantía será de15.000 euros. La administración local ya ha solicitado presupuesto a tres empresas. Cuando se abran las ofertas se estudiará cuál es la más ventajosa para el Concello y se adjudicará directamente la obra por decreto de la Alcaldía. Los trabajos se acometerán de acuerdo con las especificidades recogidas en la memoria elaboradapor técnicos municipales en los últimos meses, a fin de dar respuesta a las necesidades de la Policía Local.
Asimismo, el alcalde desveló que el ayuntamiento ya ha adquirido el mobiliario necesario para equipar las instalaciones policiales. En concreto, según el munícipe, se han invertido ya 3.600 euros en mesas y sillas. Rematar la reforma -tras más de dos años de retraso- se convirtió en una prioridad para López tras concluir las obras de creación de la nueva sede de Emerxencias de A Estrada en el antiguo Centro Comarcal, en Toedo.
La segunda fase de reforma y la instalación del mobiliario en las dependencias policiales será, a buen seguro, bien acogida por los efectivos de la Policía Local de A Estrada dado que, según pudo saber esta Redacción, parte de la plantilla tenía la impresión de que, en materia de mobiliario, las oficinas policiales eran "el rastro" de las dependencias oficiales del Concello. Sillas "heredadas" de otros departamentos, rotas e incluso una de ellas "amarrada con bridas", habían acrecentado en los últimos meses el malestar del personal, ya descontento por no lograr las mejoras salariales que demanda.
Los efectivos policiales vienen sufriendo las deficiencias de las instalaciones. en las que no hay tarima por todo el suelo sino solo "donde los técnicos decidieron colocarla" en la primera fase de reforma (efectuada en verano de 2014 y cifrada en 25.000 euros). Así lo indicó en octubre de 2014 el alcalde, que ya apuntaba que quedaba pendiente la segunda fase que ahora se prevé adjudicar. Entonces, señalaba que en la primera fase se habían realizado cambios que obligaron a invertir dinero en actuaciones no previstas en el proyecto original por lo que no se pudo acabar la reforma.
Desde entonces, se anunció la reserva de dinero para efectuar esas obras en varias ocasiones pero al final nunca terminaban de contratarse. El retraso supera ya los dos años. La sede de la Policía Local está a medio terminar. Tanto es así que, por ejemplo, donde se cambian los agentes -en la planta superior- no hay persianas y, para preservar su intimidad, se han visto obligados a tapar los cristales con unos papeles. Cabe esperar que la segunda fase de reforma solvente todas estas deficiencias.
