| El entorno del Mosteiro de Carboeiro se convirtió ayer en escenario de una concentración de vehículos clásicos. La cita, organizada por la Escudería de Clásico O Toxo, contó con la participación de una treintena de turismos que partieron de Lalín para dirigirse hasta el monasterio donde realizaron una visita guiada para luego dar cuenta de un almuerzo en Vila de Cruces.