Palma y olivo hacen buenos Ramos

Las comarcas acogen procesiones y bendiciones para conmemorar el señalado domingo

A Estrada

Palmas y olivos engalanaron en la mañana de ayer las calles de Tabeirós-Terra de Montes y Deza durante la celebración del Domingo de Ramos. El buen tiempo acompañó las diferentes procesiones programadas para rememorar la entrada triunfal de Jesucristo a Jerusalén.

Roque Ávila, contra el oleaje de la vida

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Bendición de Ramos en la Praza de Galicia. // Bernabé/Javier Lalín

Uno de los actos más vistosos fue el programado en la parroquia de San Paio de A Estrada. El párroco, José Antonio Ortigueira, se reunió con los feligreses en la Praza de Galicia, el corazón del casco urbano estradense, para realizar en este enclave la tradicional bendición de los ramos. Pequeños y mayores elevaron sus ramos para que el sacerdote los rociase con agua bendita. Seguidamente, los presentes partieron desde este punto hacia la iglesia, atravesando para ello la calle Don Nicolás. Como viene siendo tradición en los últimos años, un burro se sumó a la procesión para recordar que Jesús entró en Jerusalén a lomos de uno de estos animales.

La entrada el templo fue también vistosa, ya que se configuró un pasillo con palmas para que pasase la comitiva, encabezada por el párroco y el burro, con una niña sobre su lomo.

También en la capital dezana las palmas y los olivos se dejaron ver por las principales calles. La bendición fue a las 11.00 horas en la Plaza de Loriga. Más tarde se celebró la tradicional procesión.

Aunque el Viernes de Dolores marcó ya en algunos puntos de las comarcas el inicio de los actos de conmemoración de la Semana Santa, la celebración del Domingo de Ramos hace todavía más visible el arranque los oficios a los que los ciudadanos podrán sumarse durante los próximos días. Los de mayor concurrencia en la zona acostumbran a ser los del Jueves y Viernes Santo, con escenificaciones como la del Lavatorio de pies, los Via Crucis o las procesiones del Santo Entierro.

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