¿Por qué en Silleda no y en Caldas si? Es la pregunta que se hacen hosteleros y vecinos de la comarca al ver que en la localidad termal hay, desde hace años, terrazas instaladas al pie de la carretera nacional 640, cuando el Ministerio de Fomento obligó a retirarlas en Trasdeza y en otros municipios de la zona. "Esto es un claro agravio comparativo", denuncian residentes en Deza, en consonancia con lo que ya en 2011 había manifestado el gobierno silledense -entonces presidido por Ofelia Rey-, a raíz de los expedientes sancionadores abiertos por el ministerio a tres establecimientos del municipio.

Fomento expedientó en abril de 2011 a los bares Toxa (Silleda) y Zaux y Mesón Bandeira (A Bandeira) por "ocupar el arcén de la carretera nacional desarrollando una actividad mercantil privada de hostelería", una infracción que tipificaba como "muy grave" y para la que proponía multas de 60.000 euros, además de la restauración del arcén a su estado original, "demoliendo las obras ejecutadas". Las cartas cogieron por sorpresa a los hosteleros,que habían seguido a rajatabla las indicaciones del Concello de Silleda. Las autoridades municipales de entonces asumieron "toda la responsabilidad" y se encargaron de retirar las instalaciones, a petición de los propios afectados.

El gobierno de Ofelia Rey sostenía que había hablado con responsables de Fomento acerca de la instalación de "terrazas móviles" para pulperos en los días de feria y que les habían dicho que la autorización correspondía al ayuntamiento por tratarse del casco urbano. El ejecutivo local encargó entonces un informe a la Policía Local, que se pronunció de forma favorable a la colocación de "terrazas fijas". Por eso, desde la alcaldía se defendía la legalidad de las terrazas y se atribuía la actuación ministerial a "intereses políticos". "Mientras en unos (concellos) no ponen impedimentos para la colocación de terrazas u otros bártulos en carreteras nacionales, a otros quieren castigarlos con multas", argumentaba.

El ejecutivo de Rey se refería a la presencia de instalaciones hosteleras en la N-640 a su paso por localidades como A Estrada. Sin embargo, un negocio de la Avenida Benito Vigo había sido entonces objeto de advertencias por parte de representantes del ministerio, según habría dicho el afectado a uno de los hosteleros damnificados de Trasdeza. Las terrazas existentes en la actualidad no invaden la calzada, sino que se hallan sobre las aceras. La actuación de Fomento también obligó a retirar instalaciones en la N-640 en Lalín y Cuntis durante los años pasados.

Las terrazas de Silleda fueron levantadas en mayo de 2011 y en julio -ya con Paula Fernández Pena en la Alcaldía- trascendía que Fomento había archivado los expedientes abiertos y dejado sin efecto las multas. Transcurridos casi tres años desde entonces, en otras localidades se mantienen instalaciones hosteleras sobre la vía pública. Es el caso de las mencionadas terrazas de Caldas de Reis, en la salida de esta localidad hacia Vilagarcía de Arousa. Al menos dos establecimientos cuentan con sendas tarimas cerradas -con opción de cubierta en invierno- muy similares a las que el ministerio obligó a retirar en Silleda y en otras localidades. "¿Por qué allí si y aquí no?", se preguntan hosteleros dezanos que se consideran "agraviados".