La demanda del enlace de la autopista en Lamela (Silleda) es tan antigua como la construcción de la AP-53. Pero la obra sigue en el aire, al menos si se atiende a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2014 en los que solamente figura una partida de 10.000 euros -los mismos que este año- para, supuestamente, la redacción del proyecto. La exigua cuantía no alcanza para llevar a cabo una intervención que se está solventando con parches en la pista municipal que parte de la N-525 y que confluye en el peaje de esta parroquia. Salvo un cambio de dirección, Fomento mantiene en suspenso un proyecto que había sido asegurado por el PP silledense a comienzos de este año, aludiendo a un compromiso del ministerio.

Por otro lado, Fomento comenzó a colocar las señales de limitación de velocidad en Bendoiro a 70 por hora. Las señales se colocaron en el tramo entre la autopista y hasta después del albergue de peregrinos. La reducción de velocidad pretende evitar posibles atropellos a caminantes.