Una vecina de Lalín, con residencia en la calle Joaquín Loriga, número 21, dejó constancia ayer ante la Policía Local de que unos desconocidos habían entrado en su piso durante su ausencia, para sustraer 300 euros en metálico y varias joyas. El hurto tuvo lugar entre las 9.00 y las 13.00 horas, el tiempo en que la mujer estuvo fuera de la vivienda. Los ladrones forzaron la puerta de entrada al piso y, una vez en su interior, revolvieron todas las habitaciones, así como los muebles, en busca de dinero y objetos de valor. Las fuerzas de seguridad recomiendan a los vecinos, sobre todo a las personas de mayor edad o que viven solas, que se mantengan alertas si ven a personas sospechosas merodeando cerca de sus viviendas. No cabe duda de que el hurto de ayer, a todas luces, se produjo después de que los ladrones vigilasen a la dueña de la vivienda. Este incidente se suma a la cadena de hurtos que sufre toda la comarca en los últimos meses. El más reciente tuvo lugar el pasado jueves, día 21, cuando dos jóvenes fueron sorprendidos por la Guardia Civil mientras intentaban robar en la iglesia parroquial de Donramiro.

Timo del butano

Por otra parte, los falsos inspectores del gas también intentaron entrar en viviendas de otras parroquias de Lalín, como Botos, además de Vilatuxe o Barcia.