A ESTRADA

Aumenta la tensión en O Foxo mientras UGT pide conciliación por despido tácito

La abogada de Jesús Castro atribuye a su disputa con UGT que él no entregase a los trabajadores el papel que acordaron el lunes

José Castro y Mónica Castro, ayer, discutiendo ante los trabajadores y Jesús Castro.  // Bernabé / Luismy

José Castro y Mónica Castro, ayer, discutiendo ante los trabajadores y Jesús Castro. // Bernabé / Luismy

SILVIA PAMPÍN

En el segundo día en el que los trabajadores de Transportes y Maquinaria, afectados por dos Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) en 2012, intentaron sin éxito reincorporarse en O Foxo a su puesto de trabajo, la tensión creció ante la vivienda de quien durante muchos años fue su jefe, Jesús Castro Puente, que ayer discutió con el responsable comarcal de UGT para Deza y Tabeirós, José Castro.

Este le recriminaba a Jesús Castro que los trabajadores estuviesen "al frío y a la lluvia como perros". Al reiterar Jesús Castro el argumento esgrimido ya el día anterior por su hija de que vendió la empresa y, por tanto, O Foxo ya no es el lugar de trabajo de Transportes y Maquinaria, el sindicalista le culpó de no haber avisado a los empleados de la venta y le exigió que medie con los sucesivos dueños de la firma, tras las dos ventas consecutivas. "Sabe quienes son. Le pedimos que le dé un simple papel o que aparezca alguien con poder para decirle a los trabajadores que se vayan para casa porque, por el limbo en el que están, tienen que estar allí cada mañana mientras no haya juicio", destacaba tras la disputa José Castro.

Agregó que, aunque Jesús le decía que su hija traería el documento acreditativo de su asistencia que los trabajadores le habían pedido el día anterior a Ana Villar -la abogada de quien fue durante muchos años su jefe- cuando llegó Mónica Castro no traía el documento solicitado. La situación se violentó aun más. "Me decía que ayer (por el lunes) no había el follón de hoy (por ayer) porque no estaba yo. Y le dije que por eso ella había llamado a la Guardia Civil", ironizó el sindicalista, que acusó a Jesús Castro de haber incumplido los compromisos que adquirió en asamblea y por escrito con los trabajadores cuando le dieron el visto bueno al primer ERE: que la empresa aprovechase los meses que durase -en los que los trabajadores cobrarían el desempleo- para poner los salarios al día. José Castro volverá esta mañana a acompañar a los trabajadores en O Foxo. Luego se reunirán en Lalín con los servicios jurídicos de UGT, que ayer presentaron ante la Unidad de Mediación de la Consellería de Traballo la papeleta de conciliación por despido tácito.

La versión de lo sucedido ayer ofrecida por la abogada de Jesús Castro fue diametralmente opuesta. Asegura que, a petición de su cliente, le envió a Jesús Castro el documento acreditativo de su asistencia que los trabajadores le habían pedido el lunes. Pero "no lo han pedido", subrayó, atribuyendo que Jesús Castro no entregase esa documentación a la presencia del citado representante sindical "en una actitud bastante provocadora", "violenta, agresiva, con la que nosotros no estamos de acuerdo ni vamos a participar". Asegura, no obstante, que "al trabajador que quiera hoy, mañana o el mes que viene"ese documento se le facilitará. "A la persona agresiva y violenta, acuda al señor Castro Puente o a mi despacho, no se le va a atender jamás", sentenció.

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