El gobierno de Vila de Cruces llevará al pleno del próximo lunes (9.00 horas) la aprobación de un reconocimiento extrajudicial de crédito de 41.194 euros para hacer frente al pago de facturas de ejercicios anteriores pendientes a proveedores. Según aclaró ayer el edil de Economía, Manuel Souto, se trata de recibos que fueron entregados al Concello con fecha de marzo de 2012, aunque corresponden a trabajos precedentes.

Entre las facturas pendientes que se incluyen en esta operación económica figuran pagos por el suministro eléctrico o abonos sin realizar correspondientes al programa de contabilidad municipal y a los gestores de la página web del Concello, entre otros. Se trata del tercer reconocimiento extrajudicial de crédito que precisa hacer el ejecutivo este año para afrontar pagos de facturas adeudadas. En la sesión plenaria ordinaria del 30 de enero sacó adelante uno de 152.300 euros; el pasado día 12 de este mes convocó un pleno extraordinario para aprobar otro de 91.862,29 euros; y el próximo lunes aprobará este último para cumplir con la nueva ley de morosidad de las administraciones públicas.

La sesión servirá también para dar cuenta de la liquidación de Cuentas de 2011 y para debatir las mociones presentadas por los dos grupos de la oposición y que ya fueron analizadas ayer en sus respectivas comisiones informativas.

El BNG logra el apoyo de PSOE y PP en su propuesta de solicitar a la Xunta el mantenimiento y potenciación del programa Preescolar na Casa, aunque el gobierno presentará algunas enmiendas al texto. Donde los nacionalistas no encontraron el apoyo fue en su petición de frenar la subida del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) ni en la moción en contra de la actual reforma laboral, que también presentó el PSOE. Por otra parte, los socialistas intentarán que el pleno acepte debatir la propuesta que presentarán fuera de la orden del día para que el Concello inste a la Xunta a garantizar una sanidad pública, universal y gratuita y rechace el copago sanitario.

Señalizar la rotonda

El portavoz del BNG, Xan Blanco, presentará un escrito en el Concello para exigir la correcta señalización de la nueva rotonda construida en las inmediaciones de la Casa Consistorial, en la ramificación a la carretera que conduce hacia Merza.

Advierte que la única señal indicadora de rotonda –aún sin concluir– que hay es "pequeña y poco visible", y teme que se produzcan accidentes.