El alcalde de Rodeiro, José Vence, convocará la próxima semana una junta de portavoces para, de forma previa al pleno, analizar el convenio que propondrá al bipartito a Ecología de la Biomasa para dotar al municipio de una instalación de este tipo. El primer edil señala que el convenio que redacta el tripartito está, prácticamente, ultimado. "Grazas ás modificacións na Lei do Solo, permítese que as plantas de biomasa se constrúan en chan rústico de protección forestal". Estos cambios abren, de forma considerable, la posibilidad de ubicaciones para el proyecto de biomasa, puesto que antes de dicho cambio tendría que situarse, en el caso de Rodeiro, en la zona industrial próxima a Granitos Monte Faro y Cogal.

Los primeros contactos entre concello y Ecología de la Biomasa comenzaron a finales del año pasado. El propio alcalde y una técnica municipal de Medio Ambiente se desplazaron a Manresa para visitar una planta de este grupo, en la que tiene acciones el grupo empresarial gallego San José. Tras esta visita, una representación de Ecología de la Biomasa (con sede en Chantada) organizó una sesión informativa abierta a todos los ganaderos del municipio, a la que seguirán otros encuentros tras la firma del convenio.

Este tipo de instalaciones precisa en torno a una hectárea de terreno, de la que el 80% se destina a la acumulación de rastrojos, restos de podas y otros materiales combustibles. En este sentido, cabe recordar que a finales de 2008 los ganaderos rodeirenses también tuvieron la ocasión de conocer la propuesta de la firma AMDA Energía, con sede en Valencia y que pretendía montar una planta de biogás en el municipio dezano. Con el paso de los meses, esta propuesta terminó estancándose después de conseguir apenas una docena de firmas con otros tantos trabajadores del campo. AMDA había propuesto a los ganaderos que podían o bien participar como accionistas en la construcción de la planta o bien asumir los costes de transportes de los materiales precisos para la generación de biogás.

La planta de biomasa de Rodeiro no es la única que se proyecta en la comarca, ya que existen ideas similares para los concellos de Silleda y Vila de Cruces. También en el vecino municipio de Agolada, la planta de Carmoega levantó la polémica entre los vecinos, que aseguran que su puesta en marcha afectará a un caudal de agua.