Alfonso Loño / VILA DE CRUCES
Los dueños del estanco de Carbia, que fue objeto de un robo en pasado viernes, no ganan para sustos. Cuando todavía no se habían recuperado del suceso en el que los ladrones accedieron a su propiedad y sustrajeron botellas, tabaco y algunas monedas de la caja registradora y valoraban los daños para presentar la correspondiente denuncia, se levantaron ayer comprobando nuevos daños en sus propiedades.
En esta ocasión un coche había impactado contra un muro de un galpón que hay a pocos metros del establecimiento y, a consecuencia del golpe, derribó una parte del cierre del citado recinto. Lo que podría ser un incidente sin mayores consecuencias se convierte en casi una pesadilla para estos vecinos ya que cada poco tiempo comprueban como algún vehículo tira el muro que había sido levantado tras la última salida de vía. "Neste ano xa van tres accidentes, e o ano pasado chocou un camión", dicen los vecinos. La zona, aunque no parece muy peligrosa, se encuentra cerca de una curva que muchas veces se convierte en un trazado maldito para los pilotos que acaban "frenando" a centímetros del muro. Los afectados reclaman que la administración coloque "unhas bandas rugosas" porque, a pesar de existir una limitación de velocidad "ninguén a respecta".
