Sesión plenaria, ocio alternativo

Ana Cela / A ESTRADA

Pipas, refrescos y palomitas de maíz comienzan a tener cada vez más sentido en las sesiones plenarias de A Estrada. Los debates entre gobierno y oposición van ganando cada vez más adeptos, mientras que las nuevas tecnologías dejan la puerta abierta a la retransmisión del encuentro vía internet, gracias al registro digital de todo lo que dicen y hacen los políticos locales en estos intercambios dialécticos. A los integrantes de Unidade Veciñal Estradense, colectivo surgido al abrigo de las movilizaciones en contra de la subida del Catastro en la localidad, se sumaron el lunes los estradenses que se consideran perjudicados por el nuevo Plan Xeral y un nutrido grupo de vecinos de Souto de Vea, deseosos de saber cómo el alcalde, Ramón Campos, salía al paso de la insistencia de la oposición por conocer el proyecto de sus aguardadas aceras.

Tras sucesivos intentos de socialistas y nacionalistas por condenar el desconocimiento que reina entre los vecinos (a los que se reclama cesiones para esta obra) sobre el convenio y el proyecto constructivo de las aceras de Souto de Vea, el regidor local quiso zanjar la polémica asegurando que el documento estaría en el consistorio ayer. "Señora Raquel, non lle vou entrar ó trapo", rebatió Campos a la edil nacionalista Raquel López, antes de advertirle que sus incógnitas sobre este asunto serían resueltas "por escrito, e punto".

Sin embargo, el punto y final que Ramón Campos imprimió en sus palabras se convirtió ayer en un punto y seguido. Un grupo de vecinos de Souto de Vea pasó varias horas en el concello para conocer el proyecto de esta acción. Insisten en que fuentes municipales les aseguraron la llegada del documento y que, después de afrontar una larga espera por sus "gañas de velo", fueron advertidos de que la recepción se demoraría hasta el viernes.

Las mismas fuentes vecinales apuntaron que los lugareños se encuentran "intranquilos" ante el hecho de que ya existan balizas que establecen los metros que la medida restaría a sus fincas, aún cuando no se han iniciado, según su versión, gestiones para informales del procedimiento a seguir ni de una obra "para toda a vida".