El alcalde de Lalín, Xosé Crespo, advirtió ayer a los vecinos de que el concello iniciará una labor de control sobre el consumo de agua, destinada principalmente a descubrir la existencia de riegos por parte de los particulares, con el fin de evitar que se viva la situación de los últimos días y se garantice el abastecimiento a la población. Tras recordar que la traída no puede utilizarse para riegos y que esta labor debe encomendarse a los pozos, el regidor local reveló que pedirá un informe de los extractos a la empresa Espina y Delfín, concesionaria del servicio, con el fin de elaborar un estudio.

Aunque no quiso adelantar las posibles medidas que se implantarán para frenar los riegos privados, Crespo indicó que los vecinos no pueden dedicar el agua de la traída a riegos con la simple justificación de que la pagan, ya que, además de no estar permitido, puede generar problemas de abastecimiento. Por ello, y a la espera de contar con el informe, apuntó como posibilidad la de gravar con algún tipo de penalización el consumo de agua a partir de determinados niveles, especialmente en los meses de junio, julio y agosto.

El alcalde reconoció que el concello también es culpable de la situación por el riego de los jardines, cuya superficie se ha visto incrementada en los últimos años, aunque indicó que esta labor se está efectuando al mínimo "para non deixar morrer os xardíns" y que incluso se ha suspendido en los últimos cuatro días, circunstancia "que permitiu recuperar auga e que a situación estea normalizada cun abastecemento totalmente garantido". No obstante, apuntó que, en caso de necesidad, se prohibirían por completo los riegos de zonas de titularidad municipal.

El alcalde, que efectuó su comparecencia antes de iniciar su período vacacional hasta el mes de septiembre, explicó que la potabilizadora del concello, inaugurada hace años, cuenta con capacidad para 50.000 habitantes y en la actualidad está dando cobertura a entre 12.000 y 13.000 personas, usuarios de todo el casco urbano y de algunas parroquias. Crespo consideró que no es normal que esta infraestructura esté funcionando en ocasiones a pleno rendimiento, ya que supone que los lalinenses consumen tres veces más que la media. Cree que esta situación se debe al llenado de las piscinas y al riego, aunque especialmente a esta última.

Finalmente, aseguró que la nueva captación del río Asneiro, que aún no ha comenzado a utilizarse, será la principal del municipio pese a algunas dudas, quedando la de Botos de apoyo para el verano. En este sentido, cree que la bajada de nivel del agua en la nueva infraestructura se debe a alguna gamberrada, ya que si no se utiliza es imposible que pierda sus reservas de líquido.