El Pontevedra afronta este mediodía uno de los compromisos ligueros más complicados de la temporada: la visita al Real Madrid Castilla. Difícil por la entidad del rival, un filial merengue que marcha quinto en la clasificación con 18 puntos y que todavía no ha perdido como local este curso, pero también por las bajas con las que el conjunto granate se presentará en la capital del Estado, donde no estarán Churre y Brais Abelenda por sanción ni Seoane y Álex González por lesión.
Tras la victoria del pasado domingo contra el San Fernando, el conjunto granate espera dar la sorpresa en el Alfredo Di Stéfano, para lo cual Antonio Fernández va a tener que modificar, una vez más, su once inicial, por lo que la continuidad que busca el Pontevedra tendrá que venir en cuanto a juego y resultados más que en cuanto a los hombres que salten al campo. “La continuidad no la puedes dar cuando tienes dos sancionados que son habituales en el equipo. Cambios tiene que haber, son obligatorios, pero el equipo ha dado un nivel muy bueno y hay que darle continuidad a eso. El que salga el domingo va a ser el equipo más competitivo posible”, destacó el míster.
En este sentido, Antonio señaló que “es fundamental” que los menos habituales aprovechen las oportunidades, así como hicieron Cacharrón y Martín Diz el pasado domingo, siendo dos piezas claves ante el San Fernando. “Si solo nos basamos en un once es complicado. La gente que ahora mismo no tiene un rol protagonista tiene que ganárselo, hay gente que se lo está ganando, así se vio la semana pasada, y a la gente que le toca esperar, mejor ejemplo que ese no puede tener”, apuntó el técnico granate, que añadió que “me fijo mucho en los entrenamientos diarios, en la predisposición y en ese acierto que hay que tener durante la semana para que después se vea reflejado el domingo; un jugador que está acertado durante la semana, es muy probable que también lo esté el domingo, porque hay estados de forma y anímicos, una serie de cosas que te pueden ayudar a decidir”.
Sobre el rival, Antonio reconoció que “sabemos que es una salida complicada. Los números del Castilla en casa son importantes, no ha perdido aún. Nosotros tenemos que ir sin complejos, sabiendo al escenario que vamos, y todo pasa por ser un equipo muy ordenado, que domine las áreas y que cuando le toque sufrir sepa hacerlo. Y, por supuesto, cuando tengamos el balón, darle el criterio suficiente para poder hacer daño al Castilla”.
Así, explicó que “no podemos conceder errores propios en la salida de balón porque es un equipo que tiene calidad en la parte de arriba de sobra y contrastada. Tampoco podemos ser un equipo débil en la transición ataque-defensa. Si tenemos un problema en la distancia entre líneas vamos a sufrir muchísimo. Una de las claves va a ser manejar esos espacios que el Castilla sabe ocupar muy bien”.