El Poio Pescamar cayó en el derbi “irmandiño” contra el Ourense Envialia por un ajustado 1-3 en un encuentro muy disputado hasta el tramo final, en el que las rojillas se fueron desdibujando mientras el cuadro ourensano certificaba su remontada. El equipo de Manu Cossío se sigue alejando de la parte alta de la clasificación de la Primera División Femenina, en la que está a cinco puntos del play off por el título, a falta de que el Alcorcón –cuarto– dispute este mediodía su compromiso con el Roldán.

Inicialmente, el Poio Pescamar dominó el duelo ante un Ourense bien asentado en cancha propia y con su principal activo en el acierto de Vane bajo palos. La intensidad local le llevaba a cometer su cuarta falta antes de la medianía del período, que aprovechaba el Envialia para conseguir disputarle la posesión de balón a la rojillas. Aún así, tras una jugada personal de Jane por el ala izquierda, llegó el 1-0 por medio de Dani Sousa, con el que se llegaría al descanso.

Sin embargo, en la reanudación, María Arias ponía el empate a centro de Judith. La remontada visitante se empezó a forjar a seis minutos de la conclusión, con el gol de Judith a la salida de un saque de esquina.

En el tramo final, el Poio optó por el juego de cinco con Ana Rivera como portera-jugadora. Con las rojillas volcadas en ataque, en un robo de balón en cancha propia, Chiky hizo el 1-3 a puerta vacía.