Después de su primer y único tropiezo de la temporada, el pasado sábado ante el Alcobendas (31-30), el Cisne se desquitó con autoridad ante un BM Soria que pagó totalmente los platos rotos. Desde los primeros compases del encuentro, el conjunto pontevedrés se mostró claramente superior y arrasó al cuadro visitante para afianzarse en el liderato del grupo A, con siete victorias en ocho partidos disputados, pero sobre todo para reafirmarse como claro favorito al ascenso a Asobal, desplegando un alto nivel de balonmano ya desde el inicio de la temporada.

Ayer se evidenció la superioridad de los chicos de Jabato desde los primeros compases de juego, con un parcial de 6-1 en los primeros siete minutos de partido. El Soria recortó tímidamente distancias, pero los cisneístas cortaron rápido su intento de reacción para distanciarse todavía más, hasta los siete goles (11-4 en el minuto 12).

En el ecuador del primer acto, la renta pontevedresa seguía intacta y un parcial de 7-0 dejaba prácticamente sentenciado el duelo en el minuto 25 (20-8) y más aún al descanso (23-9).

En la reanudación, dos goles más de ventaja para el Cisne nada más arrancar el segundo acto. Con 16 tantos abajo, el Soria estaba ya entregado a su suerte y se tuvo que conformar con intentar maquillar un poco el marcador, algo que finalmente no conseguría, al perder por un claro y contuntende 37-21.