El coronavirus vuelve a golpear al Alondras. Apenas dos semanas más tarde de haber salido de su primer confinamiento, la plantilla que dirige Jorge Otero afrontará una nueva cuarentena después de que ayer se confirmase el positivo de tres futbolistas. La cifra podría incluso incrementarse, ya que un cuarto jugador, con síntomas compatibles con la enfermedad, está a la espera de recibir el resultado de la prueba PCR que se le practicó en el Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo.

El club cangués ha activado todos los protocolos de actuación y ha suspendido durante diez días los entrenamientos, además de haber informado tanto a la Real Federación Gallega de Fútbol como al Arenteiro, que fue su rival el domingo. El choque que tenía previsto disputar mañana ante el Pontellas –y que había sido aplazado en su día por su primer confinamiento– tendrá que ser suspendido nuevamente. Y, a falta de confirmación oficial, idéntica fortuna sufrirá el partido del domingo ante el Rápido de Bouzas, también aplazado en su momento. La previsión es que la escuadra alondrista no vuelva a jugar hasta el día 28, con el Ourense CF como contrincante.

El conjunto cangués contaba desde hace días con un positivo, apartado del grupo desde que se conoció su estado. El grupo al completo dio negativo en las pruebas de antígenos que se le practicaron el pasado jueves y pudo disputar el choque. Sin embargo, dos jugadores ya comenzaron a sentirse mal el domingo por la mañana y se quedaron fuera de la convocatoria. Poco después darían positivo.

Ayer la situación empeoró, con tres futbolistas más que sí entraron en la convocatoria del duelo ante el líder del grupo B de la Tercera División Galega y que manifestaron tener síntomas.