Después de que Estados Unidos no pudiera participar en el Mundial de Egipto tras reportar 18 positivos en COVID entre su plantilla, Álex Chan sigue concentrado en Dinamarca, guardando cuarentena, sin saber bien cuándo podrá volver a España.

No es su primera cuarentena, ya que el Cisne también pasó por un brote hace unos meses, y cree que quizás tampoco sea la última, dada la situación sanitaria. Al pontevedrés, que no muestra síntomas, le repetirán la prueba en tres días. Solo entonces, cuando la PCR sea negativa podrá volver de vuelta a España.

“Aunque hagas todo bien puedes tener esta mala suerte”, confiesa el central del Cisne que estaba encontrándose muy bien en los entrenamientos con la selección. “Estaba muy bien entrenábamos dos horas por la tarde y otras dos por la mañana y había un nivel bastante bueno. Fue una pena porque creo que podríamos haber competido. Toca esperar a la próxima vez, creo que somos un equipo bastante bueno y podemos mejorar. Ahora no hay ninguna cita, pero el entrenador cuenta conmigo y en 2023 habrá pruebas de cualificación de cara al Mundial”, explica Chan.

La selección estadounidense barajó la posibilidad de competir, pero la situación era muy complicada. “Desde el principio que tuvimos 18 positivos y era inviable hacer el Mundial. Se barajó hacer otro equipo, pero también estaba el entrenador contagiado y no tenía sentido mandar un equipo que no fuese competitivo y no fuese realmente la gente que queríamos llevar”, explica el cisneísta.

Con todo, “hay que mirar hacia adelante y continuar, no queda otra” y lo más cercano es la vuelta a Asobal con la segunda vuelta. Una vuelta que le preocupa a Chan, que está en reposo y lleva días sin entrenar por recomendación médica. “Viene una segunda vuelta complicada, espero estar cuanto antes en España y recuperar el tono físico, entrenar más suave para coger el ritmo, pero sé si podrá ser dentro de tres días o si tendré que quedarme más”, confiesa.

Mientras tanto el central pontevedrés pasa los días aislado con el resto de la selección estadounidense en un hotel y viendo el Mundial por la televisión. “Nos cuidan muy bien, no tengo palabras de agradecimiento para el personal”, resume el jugador del Cisne.