Segundo fin de semana consecutivo que el Pontevedra CF juega como local, en esta ocasión ante el Celta B a alas 17.00 horas de esta tarde. Lo hace de nuevo sin poder recibir el calor de todos su socios, con un aforo reducido de 300 personas.
Los de Jesús Ramos tienen una nueva oportunidad de lograr los tres puntos en Pasarón después de salvar un empate a uno ante el Unionistas de Salamanca el pasado fin de semana. Un encuentro que dejó sensaciones agridulces donde al Pontevedra le faltó acierto e intensidad en determinados momentos. Hoy toca dar la cara, ser de nuevo el Pontevedra que vimos ante Ferrol y darle la victoria a la afición ante la mirada de la señora Lola, una tarea para la que realizó su último entreno ayer en el campo de A Seca.
Ramos cuenta con todos sus hombres para el encuentro ante el filial celeste que llega en horas bajas a la ciudad del Lérez. Los pupilos de Onésimo Sánchez aún no han conocido la victoria y ni si quiera han metido un gol en los dos partidos disputados, con lo que ocupan el octavo puesto en la clasificación por el momento. Comenzaron la temporada con un empate a cero ante el CD Guijuelo y cayeron el pasado domingo en A Malata tras un gol del Racing de Ferrol.
Pese a ello los de Vigo son un filial peligroso, rápido, con calidad y muy bueno en el contragolpe.
Además juegan con la ventaja de ser un equipo especialmente joven, que recupera rápido. Frente a la juventud la plantilla granate presenta una de las media de edad más altas de la categoría, jugadores que aportan gran experiencia. Ambos equipos se enfrentaron en la pretemporada, con lo que pudieron medirse en un encuentro que acabó con un 2-3 a favor del Pontevedra.
Ahora, en plena campaña los granates deben volver a hacer de Pasarón un fortín en una temporada en la que no hay tiempo para descolgarse de la clasificación, donde actualmente está tercero con 4 puntos. La actitud y la intensidad será la clave para este encuentro, la misma intensidad que los hizo brillar durante los últimos 15 minutos ante el Unionistas, esa debe ser la tónica.
Los 300 asientos permitidos han sido asignados mediante un sorteo ante notario al que previamente se han inscrito los socios. Dadas las circunstancias el club informó que solo podrán asistir socios de Pontevedra, Marín o Poio.
