El Pontevedra se llevó el primer derbi de la temporada ante el Racing de Ferrol. El choque fue trepidante y con diversas alternativas en el juego. Los granates siempre pegaron después y los departamentales jugaron la mayor parte del partido de remolque. Fue un partido intenso y duro, con ciertas entradas a destiempo y con ciertas decisiones arbitrales que no dejaron contentos a ninguno de los dos equipos, sobre todo a los granates, ya que el primer gol local fue en clara falta al portero.

La primera parte resultó muy disputada por parte de ambos. Esta estuvo condicionada de alguna manera por el gol tempranero de los granates. En el minuto tres del partido una acción por banda derecha de Calvillo concluyó con un remate de Álex González que, viniendo desde atrás, envió con su cuerpo el cuero al fondo de la red, adelantando a los suyos.

El Racing no se fue del partido tras encajar el gol. Todo lo contrario, con más ganas si cabe, comenzó a presionar y buscar la portería contraria ante un Pontevedra correoso y que mostró mucho oficio. El partido se igualó en posesión, y en el diez, David Rodríguez dio el primer aviso al Pontevedra con un buen remate de cabeza. Se entró en una dinámica de idas y venidas en donde ambos buscaron la portería rival, aunque todas las acciones eran interceptadas por las defensas.

En el minuto 23 el Racing se volvió a acercar al gol con otro gran testarazo. Esta vez fue el carioca Elsinho el que obligó a enviar a córner a Mario. Cuatro minutos después, en posición dudosa, Joselu se plantó delante del portero pero escorado en demasía, remató mal y le dio tiempo al meta a enviar nuevamente a córner. A la tercera fue la vencida y en un balón colgado al área desde el costado izquierdo sirvió para que el uruguayo Quintana pusiera el empate en una acción en la que el atacante hace falta al portero en el área chica. A pesar de ello el árbitro concedió el gol. Desde ese momento al descanso ya no hubo ocasiones claras pero si dos equipos muy dinámicos y batalladores que buscaron el gol sin parar.

En la reanudación se repitió prácticamente la misma historia de la primera parte. En el primer acercamiento de los visitantes llegó el segundo gol del Pontevedra. Fue de nuevo tras un envío de nuevo de Calvillo por la derecha que remató Romay al fondo de la red.

De nuevo le tocaba al Racing ir a remolque en el partido. Sin embargo, la efectividad del Pontevedra de cara a gol quedó patente en la siguiente acción, pues un remate de Calvillo diez minutos después, supuso el 1-3.

El Racing se acercó en el marcador tras otro remate de cabeza impecable del uruguayo Quintana tras una falta lateral. Era el minuto 69. Los de Larraz se metían nuevamente en el partido con más de veinte minutos por disputar. Sin embargo, el resto del partido careció de ocasiones claras de gol. Se centró todo en la disputa del balón con un Racing intentando mirar hacia arriba ante un Pontevedra, que bien armado atrás, intentaba salir a la contra para matar el partido. No obstante, el dinamismo se fue apagando con constantes faltas, pérdidas de tiempo y un carrusel de cambios imparable.

Victoria pues en un derbi atractivo del Pontevedra que se estrenó en A Malata por lo grande. Los de Jesús Ramos mostraron estar más rodados y se mostraron bastante efectivos de cara al marco contrario.