Mientras están pendientes de qué pasará con el club y cómo será el final de la liga para sus compañeras, Clara y Antía siguen su plan de recuperación tras la rotura de ligamento cruzado y menisco. "Es una recuperación bastante especial ya que todo es online y es un poco raro, es nuestra rodilla y no es lo mismo trabajar a distancia que mirar el estado físico de una persona, pero lo llevamos adelante" señala Clara.

Las rojillas no pueden contar con un fisioterapia debido a las medidas de seguridad y se preocupan por su evolución: "No nos pueden decir si lo hacemos bien o mal, tratamos de hacer videollamadas para ajustar el trabajo y le dedicamos unas dos horas al día a la recuperación", señalan. Ambas se han desplazado al pueblo de Antía, en Ourense, para poder ejercitarse al aire libre en una casa con jardín. Aunque saben que no podrán jugar hasta la próxima temporada, están muy pendientes de la situación e ilusionadas por poder disputar la final a cuatro de la Reina.