La prueba de que de verdad algo está cambiando se verá hoy sobre el césped de la ciudad deportiva de Getafe. El equipo granate se enfrenta a las 11.30 horas al filial que intenta salir de la zona de descenso y peleará con ansia. De esa ansiedad es de la que se quiere aprovechar Jesús Ramos para darle la vuelta a la situación. El técnico no ha encajado aún ninguna derrota liderando el banquillo y hoy quiere darle al Pontevedra el impulso que le falta.

El equipo comienza a despegar de la zona de peligro, pero necesita sumar. Con 35 puntos los granates están aún a tres del descenso. El rival se encuentra en una situación mucho más comprometida. Siendo el antepenúltimo en la clasificación (con 28 puntos) lleva tres jornadas sin perder, sumando dos victorias y una derrota, y llega en una buena dinámica a este encuentro.

Por ello no hay que confiarse, ya que en el partido de ida, yendo el Getafe B colista, marcó en Pasarón un 2-3 que supuso el fin de la era Luismi. Parece que ha llovido mucho desde entonces, pero este encuentro fue el golpe de realidad que cambió todo tras un inicio muy inestable en la liga. Entonces encarriló al equipo Jesús Ramos como lo está haciendo ahora. La plantilla está saliendo reforzada de la racha negra con Pouso, pero ahora toca ganar fuera de casa, algo que Jesús Ramos solo ha enfrentado una vez, ante el Celta B tras la marcha de Luismi.

Tras el baño de goles el pasado fin de semana en Pasarón toca demostrar que no fue flor de un día, y que los granates saben apretar. La marca Ramos viene siendo competir los 90 minutos y así deberá ser hoy en Getafe, donde la afición quiere volver a ver todo el potencial del equipo y el frenesí goleador de Rufo.

Además este encuentro marca la recta final de la competición, ya que después de hoy quedan por delante solo 10 partidos, y aún hay mucho que pelear.

Se pierden el encuentro Nacho López por lesión muscular, Santi Figueroa con un esguince de tobillo ni Berrocal. El que sí que probablemente sea titular pese a las molestias en los últimos días será Campillo. Todo apunta a que no habrá grandes cambios en el once titular de Ramos y Romay repetirá como mediocentro, algo que está funcionando en el equipo.