Aunque las sensaciones de los últimos partidos no han sido malas, los resultados todavía no están acompañando del todo al Pontevedra, que acumula nueve jornadas de liga seguidas sin ganar. Esta mala dinámica le costó el puesto a Carlos Pouso, que curiosamente fue uno de los principales valedores del fichaje de Adrián Cruz, con el que había coincidido en el Logroñés.

"A Pouso le debo mucho, me dio muchísima pena y muchísima rabia no poder intentar ayudarle desde dentro del campo porque fue el que apostó realmente por mí. Pero esto es fútbol, estoy seguro de que le vendrán oportunidades mejores y que tendrá más suerte porque es un gran entrenador", comentó el jugador.

Sobre los entrenamientos con Jesús Ramos, Adrián Cruz ve poca diferencia con su predecesor. "Creo que tienen muchas cosas similares. Es cierto que Jesús ya lleva tiempo aquí y que nos conoce a todos seguramente mejor que Carlos. Además, es un hombre de fútbol, le gusta ver muchos vídeos, mucho fútbol y viene de jugar. Creo que tiene todas las condiciones para ser un entrenador importante, sobre todo en este Pontevedra, porque creo que no hay ahora mismo persona más capacitada que él", señaló.

Cruz destacó sobre todo la intensidad. "Siempre está muy metido en las tareas de los entrenamientos y te hace estar al cien por cien, no te puedes despistar porque requiere mucha intensidad, y eso al final es lo que te da poder competir mejor".