Silvia Aguete protagonizó el susto de la jornada el martes, en el partido de Copa Galicia entre el Poio Pescamar y el Ourense Envialia (0-0), celebrado en el pabellón de A Seca. A pocos minutos para el descanso, la portera rojilla recibía un golpe en la cabeza que le hacía perder el conocimiento. El encuentro estuvo parado unos 20 minutos hasta que la jugadora pontevedresa fue trasladada en ambulancia a un centro hospitalario.

Según fuentes del club, Silvia se sometió a un TAC en el hospital Quirón Salud Miguel Domínguez cuyo resultado fue positivo, recibiendo el alta la misma noche del martes. Aunque el golpe no supuso nada más que un susto, la portera deberá guardar reposo unos días y su entrenador, Raúl Jiménez, le dará descanso el fin de semana, por lo que se perderá el partido de liga contra el Bilbo (sábado, 18.30 horas, pabellón de A Seca).

Precisamente el técnico andaluz se mostró aliviado con el resultado de las pruebas, ya que el golpe sufrido por la meta pontevedresa fue muy aparatoso y se temieron lo peor. "Fue en una contra del Ourense. Silvia salió a hacer la cobertura y la jugadora rival le dio con la rodilla, además al caer se golpeó contra el suelo. Se quedó sin conocimiento y estaba sangrando mucho", recuerda Raúl Jiménez. La futbolista aún estaba algo mareada ayer, pero todo dentro de la normalidad.

Así, la baja de Silvia será un nuevo contratiempo para el Poio Pescamar, que tampoco podrá contar con Andrea Feijoo, todavía recuperándose de su lesión, ni con las lesionadas de larga duración Antía y Clara.