El 11 de diciembre de 2018 un mal movimiento durante un entrenamiento frustró la temporada de Javi López con el Pontevedra. El extremo malagueño sufrió una rotura de ligamento cruzado anterior que cortó radicalmente su progresión en el equipo de Luismi cuando estaba en su mejor momento y, tras pasar por el quirófano en enero, ha estado casi siete meses librando una batalla en solitario que la semana pasada, por fin, concluyó con victoria.

Aunque no se encuentra todavía al cien por cien físicamente, Javi López sí está al cien por cien de ánimo, ganas e ilusión por volver a los terrenos de juego. "La rodilla está respondiendo bien y lo que me falta ahora es soltarme", apunta el futbolista, que lo que necesita ahora es ir cogiendo ritmo de competición para volver a ser importante en el Pontevedra.

El regreso a los entrenamientos con el resto de sus compañeros ha sido una inyección de moral para el andaluz, que reconoce que fue duro, "estar siempre trabajando a parte con Manu (Barros) y ver que el grupo entrena de forma diferente... al final lo que quieres es jugar y trabajar con el equipo". En este sentido, Javi destaca que "ahora mismo soy uno más y esperemos que esta temporada vaya mejor".

En total han sido casi ocho meses sin poder jugar y entrenando al margen del equipo. Aunque ha sido duro, también le ha servido para darse cuenta de que es más fuerte de lo que creía. "Al principio pensaba que iba a ser todo más difícil. Nunca he sido una persona muy fuerte de cabeza, pero esta lesión me ha servido para darme cuenta de que no es así. Los compañeros me han ayudado un montón, el cuerpo técnico, la afición, mi pareja... El no estar solo me ha ayudado muchísimo", afirma el extremo. En este mismo sentido, señala que "no soy el tío más positivo del mundo, pero esto me ha ayudado a serlo más que antes, porque ves que al final de todo se sale".

El Pontevedra ha cerrado, por ahora, seis fichajes esta pretemporada (Pol Bueso, Ndiaye, Adighibe, Álvaro Bustos, Brian y Álvaro Naveira), pero se puede considerar a Javi López como el séptimo refuerzo. El extremo agradece la confianza que le dio el club en los momentos más difíciles, pues eso le ayudó en su proceso. "El mismo día que me lesiono recibo una llamada de Roberto Feáns para decirme que no me preocupe por nada y que no piense en nada más que en recuperarme, que me recupere tranquilo", recuerda el futbolista, que añade que "me dio tranquilidad y me hacía ver que me iban a renovar, y eso te ayuda mucho a no ir con prisa y a no intentar adelantarte, evitando el riesgo de recaer".

Objetivo: ascender

Javi se muestra ilusionado con la nueva temporada y ve al equipo con opciones de firmar una buena actuación. "Se ha mantenido el bloque, que es muy importante, y creo que los fichajes que han venido ha sido para sumar. El equipo va a competir y queremos estar arriba", señaló el extremo, que reconoció que "la pretemporada no está siendo la mejor, pero se ha hecho buen equipo y esperemos que salgan bien las cosas".

Sobre el objetivo del ascenso que mencionó la presidenta, Lupe Murillo, en la vuelta a los entrenamientos este verano, Javi López no lo ve imposible, pero recuerda que hay que ir paso a paso. "La presidenta quiere subir y nosotros también, a todo el mundo le gustaría celebrar el ascenso a final de temporada. Sabemos que la Segunda B es complicada, que hay mucha igualdad en todos los grupos. La clave va a estar en hacernos fuertes en casa, como el año pasado, y mejorar los resultados a domicilio, que fue lo que nos faltó; mejorando eso yo creo que sí que vamos a estar arriba", destacó el futbolista, que también recalcó que en esta categoría "no hay favoritos" reales porque hay mucha igualdad.

En este sentido, sobre el grupo en el que ha quedado encuadrado el Pontevedra, apunta que "da igual quién te toque porque hay mucha igualdad. Aquí no hay estrellas, si falta un jugador no se nota, y al final no importa tanto los rivales que te toquen, salvo por los viajes largos".