El futuro del Pontevedra CF pasa porque el club cuente con una ciudad deportiva. Así lo señaló ayer la presidenta, Lupe Murillo, que quiere la entidad siga creciendo y para ello pretende unas instalaciones que le permitan dejar de depender de los campos municipales y de los pocos horarios disponibles. La directiva presentó ayer un proyecto para hacer viable esta ciudad deportiva para la que buscan una ubicación. Ya tienen hasta cuatro alternativas en el municipio, a los que se suman los ofrecimientos en Marín y en Cerdedo-Cotobade.

La propia presidenta mostró el boceto del proyecto de ciudad deportiva que quieren los granates. Constaría de tres terrenos de juego para disputar los partidos y los entrenamientos, dos de ellos de fútbol 11 y uno de fútbol 8, que tendrían una superficie mixta, descartando el césped natural en todos ellos debido al difícil cuidado que supone y al gran uso que tendría al ser utilizado por los 16 conjuntos de la cantera y por el primer equipo. Además, contaría con instalaciones de vestuarios, una biblioteca para que los niños pudieran estudiar e incluso una sala con pantallas para que los canteranos pudieran visionar sus propios partidos.

Según las primeras estimaciones, la construcción del proyecto supondría una inversión para la entidad granate de 2 millones de euros que pagarían a largo plazo. Desde las oficinas de Pasarón ven superada la crisis de la deuda que asoló al Pontevedra hace una década y las cuentas están dando superávit, por lo que consideran el proyecto viable económicamente. "Si mañana los políticos nos dan el visto bueno, lo contratamos pasado mañana", indicó Murillo.

Tres posibles localizaciones

El pasado mes de marzo, la comunidad de montes de Verducido certificaba su oferta de terrenos para la posible ciudad deportiva granate. Se trata de una cesión de al menos 3 hectáreas para realizar el proyecto, una alternativa que no contó con objeciones en la asamblea de comuneros para que su presidente, Marcos Rey, iniciase las negociaciones con el Pontevedra para realizar allí su ciudad deportiva. "Tengo que agradecerle a Marcos Rey, porque la suya fue la primera llamada de teléfono que recibió este club para ponernos algo fácil y es un honor que nos lo ofreciesen sin oposición porque es que nos quieren", apuntó Murillo, recordando también el papel en las negociaciones del presidente de los comuneros de Lérez, Martín Martínez.

Precisamente en Lérez, el club tiene la opción utilizar el campo Raimundo Piñeiro, junto con terrenos para construir al menos dos recintos más, lo que supone un mínimo tres hectáreas en Monte Balado, a unos cinco kilómetros en línea recta desde el centro de la ciudad.

Otra de las alternativas, en este caso propuesta por el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, es que el Pontevedra CF utilice el antiguo campo de la SD Lérez en Xeve. Sobre esta alternativa, Murillo trasladó al regidor que en el caso de que se llevase a cabo ahí ciudad deportiva, el Concello debería urbanizar la zona. "Para mandar a niños de 7 años, que es cuando entran en el club, habrá que poner unas condiciones como unas aceras, iluminación, para unir los campos de Xeve y el que era del SD Lérez y sabemos que el presidente de la comunidad de montes le gustaría explotar este campo", explicó la presidenta.

En tercer lugar, resurgió la opción de realizar la futura ciudad deportiva en una parcela en las proximidades de las marismas de A Xunqueira de Alba. Se trata de unos terrenos que son de dominio marítimo terrestre que cuenta ya con otras instalaciones deportivas. Según señaló la presidenta del Pontevedra, ya han contactado con Costas y darían luz verde a una concesión sobre ese terreno. Al parecer, sería necesario la modificación del PXOM para contemplar un camino existente en la zona.

"Es la opción que más nos atrae por la gran proximidad que tiene con Pasarón y la ciudad. No hay que olvidar que con esta infraestructura podemos revitalizar la zona y creemos que también que ésta puede ser la opción más fácil", mantiene Murillo.

Tras dejar pasar el periodo electoral, la intención del club es retomar las conversaciones tanto con Lores como con el nuevo concejal de Deportes, Tino Fernández. "Con el alcalde ya hay conversaciones avanzadas, pero queremos darle un impulso", aseguró la presidenta.

Una "casa" granate

"Cuando hablamos de ciudad deportiva hablamos del futuro e imagen del Pontevedra CF, un club es la masa social, los niños de la cantera, nuestras instalaciones, hacernos importantes para resultar atractivos en el mundo del fútbol y más para mejorar la cantera. En los más de 75 años de la historia de este club es de recibo que tenga una ciudad deportiva", indicó Murillo. La presidenta recordó situaciones en A Xunqueira donde el conjunto de Luismi entrena en la mitad de un campo mientras en la otra lo hace un equipo alevín. "Ésta no es la calidad que debe tener nuestro equipo", añadió Murillo.

El primer equipo ha trasladado sus entrenamientos la temporada pasada al campo de Cerponzóns, pero antes lo hizo en el de A Seca, en Poio, y también en el campo de Zacande, en Meis. "Es ya un tema de dignidad de club grande y ya para que no hablasen mal de nosotros nos hemos ido de A Xunqueira a otros campos para que no se moviesen los niños de otros clubes para generar una cierta cercanía y compartir unas instalaciones que otros también necesitan y ya va siendo hora que este club tenga su ubicación en Pontevedra, porque es el club más importante de la ciudad, el tercer club de Galicia y el segundo en cuanto a número de títulos", explicó la presidenta del Pontevedra.

"Ver que el Deportivo tiene una pedazo ciudad deportiva en Abegondo y el Celta tiene una y va a hacer una mucho más grande en Mos, nos preguntamos cómo ni siquiera tenemos una miniciudad deportiva, nuestro club es lo que es y ha llegado el momento de tener nuestro lugar y esa ciudad deportiva realmente debe ser nuestra casa".