El Cisne no pudo con el campeón de la División de Honor Plata, un Balonmano Nava que se mostró superior a partir del ecuador de la primera parte, cuando logró una cómoda renta que ya no dejaría escapar.

El equipo pontevedrés empezó fuerte el último encuentro de la liga regular, yendo por delante en un ajustado marcador en los primeros diez minutos. Pero a partir de ahí el Nava demostró por qué es ya equipo de Asobal, yéndose al descanso con un cómodo 17-10. En la reanudación, lejos de recortarse las distancias, estas se ampliaron. El Cisne se conformó con maquillar el marcador en el tramo final.