Un mes de competición es lo que le queda por delante al Peixe Galego, que mañana comenzará la segunda vuelta de la segunda fase de la liga LEB Plata. El conjunto marinense no pierde de vista el objetivo de acabar entre los cinco primeros clasificados y poder disputar así el play off de ascenso. A pesar de haber mostrado su cara más irregular en la primera parte de la segunda fase, los hombres de Javier Llorente están a solo dos victorias del quinto clasificado, el Aquimisa Queso Zamorano, y no descartan para nada acabar la liga entre los mejores.

Pero para ello deberán mejorar sus números como locales, además de su imagen, pues los marinenses no han ganado ningún partido en el pabellón de A Raña en la segunda fase, algo que han compensado ganando los tres que han disputado a domicilio. Antonio Pantín admite que "no encontramos el motivo" por el que el equipo muestra dos caras tan distintas. "Tenemos ganas de trasladar las buenas sensaciones fuera a casa", asegura el pívot, que analiza que "en la segunda fase hemos ganado todos los partidos fuera, contra equipos además potentes, como Girona, que está Jordi Trias, el Murcia y el Alicante, que deben tener los dos mejores presupuestos de la liga, de hecho Alicante creo que llevaba meses invicto y llegamos nosotros y ganamos, y en casa, en cambio, que normalmente era nuestro fortín, no estamos bien".

El jugador santiagués no cree que el equipo tenga presión cuando juega en A Raña, pero recordó la última derrota en casa, contra el Azuqueca (77-101). "El caso del colista fue especialmente sangrante porque nos dieron un baño, nos pasaron por encima. Flojeamos en defensa, no jugamos como equipo... la imagen fue muy mala y fuera de casa está siendo todo lo contrario", apunta.

Por otra parte, el Peixe ha mostrado su mejor cara contra los rivales, a priori, más duros, algo que ha supuesto una inyección de confianza. "Ganar a estos equipos que eran candidatos al ascenso es un subidón de moral, en ese sentido estamos contentos, pero nos duele no haberle dado ninguna victoria a nuestra afición, seguro que para la gente también tiene que ser duro", comentó.

Opciones reales

Pantín confía en las opciones del equipo, "sabemos que está difícil, pero si ganas dos partidos seguidos te metes en la lucha, de hecho, si hubiésemos ganado un partido de casa estaríamos metidísimos. Tenemos que intentar mantener el nivel a domicilio y mejorar en casa".

Así, en esta segunda vuelta, el pívot cree que todos los encuentros será difíciles. "Siempre piensas que los partidos fuera son más complicados, pero viendo cómo estamos... En esta categoría todos los partidos suelen estar igualados y la mayoría se deciden al final. Los tres partidos que tenemos en casa son contra los rivales a los que hemos ganado, pero son candidatos al ascenso, así que fáciles no van a ser, y después tenemos que visitar tres pistas muy complicadas", comenta, y añade que el partido de mañana contra el Villarrobledo (19.30 horas) "quizá sea clave, porque si les batimos fuera de casa, sin duda vamos a tener opciones de meternos ahí".

Pantín recordó el partido disputado en Marín (76-85). "En la primera parte, su base nos aniquiló, metió 21 puntos. Hay que defender bien a estos jugadores, que son unos killers, y estar fuertes en el rebote, que yo creo que es una de las claves en nuestro equipo, si no damos segundas opciones y jugamos como sabemos en cinco por cinco y llevamos el partido a nuestro ritmo, seguro que vamos a tener opciones", finalizó.