Un "nueve" de presente y de futuro

El remedio para la sequía goleadora de los delanteros del Pontevedra estaba en casa y llama José Rivera. En medio minuto, el "nueve" del filial marcó un tanto decisivo para las aspiraciones del conjunto granate, al significar la victoria sobre el Guijuelo (2-1). A los pocos minutos, el vídeo de la jugada ya corría como la pólvora por las redes sociales. "Lo vi ya bastantes veces", admite el propio futbolista, que reconoce que fue un gol muy bonito, "a parte el centro de Borja es perfecto, lo puso en mi cabeza, y después entra bien".

Ese tanto desató la euforia de la afición y también de sus compañeros de vestuario, que lo felicitaron nada más acabar el partido, algunos de ellos también públicamente a través de las redes sociales y con mucho humor. "Me vacilan", admite riéndose, "hay muchas bromas, me tratan muy bien".

Luismi Areda también lo felicitó, a él y a todo el equipo, por la importante victoria del domingo. "Marca un gol y gana el partido", recuerda que le dijo el técnico cuando le dio entrada en el terreno de juego. Y el delantero no le defraudó. "Cuando eres joven y canterano, sueñas con meter un gol con el primer equipo, pero nunca imaginas que realmente lo vas a conseguir", comentaba humildemente Rivera, al término del entrenamiento de ayer en Cerponzóns, "estoy a disposición del míster para lo que pueda ayudar. Elequipo necesitaba ganar si quería seguir con opciones de meterse en el play off y ahra nos mantenemos ahí, a seis puntos del líder y a cuatro del play off, y vamos a por todas".

El futbolista, de 19 años, apareció cuando el Pontevedra más echaba en falta los tantos de sus delanteros, que en la segunda vuelta no están teniendo suerte de cara a la portería contraria; la aportación de Mikel Arruabarrena y de Javi Pazos al equipo está siendo positiva, pero no en forma de goles. "Hay que tomárselo con calma y teniendo la cabeza fría, porque los goles llegarán", asegura Rivera, que quiso destacar la calidad de sus compañeros y su importante trabajo a lo largo de los partidos.

El año de Rivera

Nadie mejor que un "nueve" puro para entender que en el arte de marcar influyen mucho las rachas, y esta temporada está siendo la de Rivera. El delantero, de 19 años, acumula 26 goles, uno en Copa Federación, otro en Segunda B y 24 con el filial del Pontevedra, en Primera Autonómica. De estos últimos, seis los marcó en un único partido, contra el San Martín, que el equipo ganó por 12-2 hace exactamente un mes.

Además, ha sido su año de debut con la primera plantilla en liga (en Copa Federación ya había jugado la campaña anterior); dispuso de unos cinco minutos contra el Deportivo Fabril en la primera vuelta y, aunque fue convocado en varios encuentros más, no volvió a tener oportunidad de jugar hasta el domingo contra el Guijuelo. Sustituyó a Kevin cuando quedaban siete minutos y el primer balón que tocó lo mandó al fondo de la red rival.

"Está saliendo todo bien", comentaba el jugador, que también se refirió a la situación del Pontevedra B, que es segundo en la clasificación de Primera Autonómica, a solo dos puntos del líder, el Portonovo. "El filial es un buen equipo y yo ayudo como mejor puedo, que es metiendo goles", explica.

Y es que Rivera tiene por delante dos objetivos muy ambiciosos en este tramo final de temporada: alcanzar el liderato de Primera Autonómica con el filial y certificar el ascenso a Preferente mientras entrena con el primer equipo en busca de más oportunidades en Segunda B, como la del pasado domingo contra el Guijuelo. "Yo tengo que hacer todo lo posible con el filial, este año se está dando muy bien, se están haciendo bien las cosas, estamos segundos a dos puntos del líder, y con el primer equipo estoy trabajando a tope", destaca el futbolista, que además se ha marcado como reto personal llegar a los 30 goles, algo que no parece para nada imposible teniendo en cuenta que está solo a cuatro de esa cifra y tiene una media anotadora de casi un tanto por partido, con varias jornadas todavía por delante para jugar.

El "nueve", natural de Vilagarcía, está llamando con fuerza a las puertas de Luismi Areda. El técnico y la afición granate están siendo testigos del despegue de un delantero con un presente excepcional y un futuro ilusionante y prometedor.