El Teucro ha eludido el aviso de sanción que amenazaba con darle el próximo partido ante el Anaitasuna por perdido tras abonar ayer el pago del fondo arbitral. De este modo, los azules seguirán peleando por la permanencia sobre la pista este fin de semana ante el Anaitasuna.

El presidente del Teucro, Carlos García-Alén, confirmaba ayer que el club hizo frente antes del plazo establecido a los 7.000 euros del fondo arbitral por el arbitraje de varios partidos en casa. El Comité Nacional de Competición de la Federación Española de Balonmano amenazó la pasada semana al club azulón con la suspensión y pérdida por un resultado de 0-10 el encuentro de esta jornada ante el Anaitasuna, correspondiente a la decimonovena jornada de la Liga Asobal, si no abonaba la cantidad reclamada con una antelación mínima de cuatro días antes de la fecha fijada para la celebración el partido, el 23 de febrero.

García-Alén señaló que la situación se dio "debido a problemas de liquidez habituales de estas alturas de la temporada". Más concretamente, el club esperaba ingresar una subvención del Concello que no habría entrado en plazo, provocando un desajuste en las cuentas teucristas. "Decidimos asumir riegos y dejar algunas cosas sin pagar ahora mismo, pero por lo menos el partido se jugará sin ningún tipo de problema", indicó el presidente, que indicó que este tipo de amenazas de sanciones "son habituales todos los años" por la situación de dificultades que atraviesan los clubes.

Los plazos del club pasan ahora por cobrar patrocinios pendientes. "Tendremos que movernos para conseguir ingresos, porque las subvenciones están bien pero no podemos vivir exclusivamente de eso, el patrocinio es la línea a seguir", indicó García-Alén. Desde el club también lamentan que las obras en el pabellón estén dificultando las actividades que esperan realizar en el palco de cara a conseguir ingresos. "El problema no es gestionar al equipo de Asobal, tenemos un equipo en Primera regional y equipos masculinos y femeninos base y todo eso son un gasto que tenemos que gestionar", indicó el presidente.

Desde el club no tenían dudas de que el equipo iba a poder pelear este fin de semana en la pista. "Ante el Anaitasuna es un partido importantísimo, podemos volver a vencer en casa. Por ahora tenemos que seguir el rebufo de los que están por delante nuestra, tenemos que ser muy fuertes en casa y podremos salvarnos", indicó el presidente.

Precisamente en el aspecto deportivo García-Alén se mostró optimista. "Creo que tenemos muchas opciones de mantener la categoría y parece que dejamos atrás las lesiones y salidas inesperadas y se ha formado una piña entre jugadores y cuerpo técnico interesante y será una de las claves", afirmó. La otra "clave", para el presidente, será "en jugador el número 8" en referencia a la afición.