A la Segunda B se le conoce como el fútbol modesto, pero si se atiende a los precios de las localidades parece que de modesto tiene poco. Y eso que el grupo I no es de los más caros de la categoría. Sin embargo, el alto coste de las entradas en muchos campos están provocando que apenas se cubra un 20% del aforo en los más grandes, como es el caso del Helmántico de Salamanca, el Plantío de Burgos o el propio Pasarón.

Por ejemplo, el Helmántico es el estadio con mayor aforo del grupo I. Caben más de 17.000 espectadores, pero de media acuden solo 3.500. Algo parecido sucede con el campo del Burgos, que será el próximo escenario que visitará el Pontevedra; tiene sitio para más de 12.000 personas, pero la media de asistencia no llega a las 3.000. En este grupo también está Pasarón, que tampoco ha superado la barrera de los 3.000 espectadores esta temporada, teniendo espacio para 12.000.

Hay muchos factores que influyen en la afluencia de público a un estadio y uno de ellos es el precio de las entradas al mismo. Parece lógico que los mejores estadios de la categoría tengan las localidades más caras porque ofrecen mayor variedad de elección en cuanto a gradas. Sin embargo, también se puede comparar que una entrada para un Fondo en Pontevedra, Ponferrada, León y Salamanca cueste igual que una localidad en Tribuna en el campo del Fuenlabrada, una lateral en el del Internacional de Madrid y una general en San Sebastián de los Reyes, Navalcarnero y Bouzas: 15 euros.

Las entradas más caras del grupo I son las del Burgos que, a pesar de disponer del estadio más grande, solo ofrece dos opciones: 25 euros para tribuna cubierta y 20 euros para fondo cubierto.

Los más baratos

Fuenlabrada es la localidad en la que sale más barato ver un partido del primer equipo. Por solo cinco euros ya se puede acceder a un Fondo. Además, por diez euros se puede entrar en Preferencia y por 15 en Tribuna. Similares son los precios que ofrece su vecino de Boadilla del Monte, el Internacional de Madrid: siete euros el Fondo y 15 euros la grada lateral.

El Coruxo, por su parte, esta temporada ha decidido bajar los precios de sus entradas de 15 a diez euros. En esa línea está también el Unión Adarve y la mayoría de los filiales, que ofrecen condiciones especiales para socios del primer equipo y que no siempre tienen un precio fijo en sus entradas. Es el caso del Real Madrid Castilla, que no vende entradas en taquillas, sino que negocia directamente con los clubes rivales, aunque los precios de las localidades siempre suelen ser de diez euros. El acceso a los partidos de Celta B, Deportivo Fabril, Atlético de Madrid B, Valladolid B y Las Palmas Atlético suele costar entre diez y 15 euros.

Más "suerte" tienen equipos como la Ponferradina y la Cultural Leonesa, que esta temporada están llegando e incluso superando la mitad del aforo de sus estadios. En el caso de El Toralín, con aforo para algo más de 8.400 espectadores, la asistencia esta temporada, con el equipo líder del grupo I, está rozando los 5.000 espectadores. En cuanto al Reino de León, con un aforo de más de 13.400 localidades, la asistencia de público también ronda los 5.000 espectadores, casi un 40% de ocupación.

Pasarón no llega a 3.000

La media de entrada a Pasarón esta temporada está en torno al 20% de su aforo, a pesar de que el club ya ha llevado a cabo promociones para mejorar la asistencia, como sucedió en el último partido contra la Ponferradina, para el que los socios pudieron retirar una entrada gratuita para un acompañante.

El capitán del equipo, Edu Sousa, comentaba la semana pasada que el apoyo de la afición es fundamental para que las cosas funcionen mejor sobre el césped y lamentaba que la asistencia no estaba siendo buena. Y es que en los primeros partidos de esta temporada, el estadio de O Burgo no ha alcanzado todavía los 3.000 espectadores. Esa bajada en la asistencia se está notando, sobre todo, en la grada de Preferencia.